Supuestamente un lince ibérico fue atropellado en la región del Cerrato palentino, en un incidente que pone en evidencia los riesgos que enfrentan estos felinos en su proceso de reintroducción. La muerte ocurrió durante la madrugada del fin de semana y fue detectada gracias a la tecnología de posicionamiento satelital utilizada en el proyecto de conservación.
El incidente ocurrió en la madrugada del sábado al domingo y fue descubierto por agentes medioambientales y técnicos especializados en #conservación durante el día siguiente, gracias al uso de un sistema de rastreo satelital instalado en los animales reintroducidos en la región.
Este ejemplar, identificado como Vouga, presuntamente una hembra originaria del centro de cría de Silves, en Portugal, fue liberada en el área de #reintroducción en abril pasado.
Se estima que es uno de los ocho linces que se han soltado en esta zona en los últimos años, en un esfuerzo conjunto por recuperar la población de esta especie en España.
La tecnología de posicionamiento satelital ha sido fundamental en estos esfuerzos, permitiendo a los técnicos y agentes seguir en tiempo real las últimas ubicaciones de los ejemplares.
En este caso, las últimas coordenadas indicaban su presencia cerca de la carretera, lo que facilitó su localización y la realización de la necropsia en el Centro de Recuperación de Animales Silvestres de Burgos.
Desde la Junta de Castilla y León, supuestamente se ha recalcado la importancia de extremar las precauciones durante los desplazamientos en zonas de reintroducción, especialmente en horas nocturnas y en períodos de alta afluencia turística, cuando aumenta el riesgo de atropellos.
Los atropellos constituyen la principal causa de mortalidad no natural en las poblaciones de #lince ibérico en toda España. Desde el inicio del proyecto, las autoridades regionales han identificado los llamados puntos negros en las carreteras cercanas a las áreas de reintroducción, principalmente en la P-405 y P-412, y han llevado a cabo trabajos de seguimiento y control para mitigar estos riesgos.
Entre las medidas adoptadas, se encuentran labores de desbroce en los márgenes de las carreteras, con el fin de mejorar la visibilidad y reducir el peligro de accidentes.
Además, actualmente se tramita un proyecto para instalar vallados en unos 8 kilómetros de la carretera P-405 y mejorar la señalización en las carreteras P-405 y P-412.
Estas acciones pretenden disminuir la probabilidad de atropellos y proteger a los ejemplares reintroducidos.
Supuestamente, también se ha colaborado de manera estrecha con la Demarcación de Carreteras del Estado para adaptar tramos de las autovías A-62 y A-67, ajustando la infraestructura y limpiando zonas de dominio público que puedan servir de refugio para conejos y, en consecuencia, atraer a los linces.
El proyecto de reintroducción del lince ibérico en el Cerrato forma parte de una estrategia más amplia de recuperación de esta especie en la península ibérica
El proyecto de reintroducción del lince ibérico en el Cerrato forma parte de una estrategia más amplia de recuperación de esta especie en la península ibérica, donde su población ha sido severamente reducida por la pérdida de hábitat, la caza y las atropelladas en vías.
La historia del lince ibérico en la región se remonta a siglos atrás, cuando esta especie era común en toda la península, pero su población descendió drásticamente en las últimas décadas.
Supuestamente, la muerte de Vouga supone un revés para los esfuerzos de conservación, aunque las autoridades insisten en que estas acciones son parte de un proceso de recuperación que requiere paciencia y colaboración entre diferentes instituciones y la sociedad civil.
La necropsia será fundamental para determinar las causas exactas y evaluar las medidas futuras para evitar incidentes similares.
En definitiva, la protección del lince ibérico en el Cerrato palentino continúa siendo un reto, pero también una prioridad para la conservación de la biodiversidad en España.