La ciudad de Buenos Aires ha incorporado 162 nuevos bomberos, superando los 2.000 profesionales en su cuerpo, con equipamiento de última generación para responder mejor a emergencias y proteger a sus habitantes.
Con esta incorporación, el total de bomberos profesionales en la capital argentina supera los 2.000 efectivos, todos equipados con tecnología de última generación que garantiza una intervención más eficiente y segura.
Supuestamente, esta expansión del cuerpo de bomberos responde a un plan estratégico de la administración local para modernizar y ampliar los recursos de protección civil en la ciudad, que en los últimos años ha experimentado un crecimiento poblacional y urbanístico que demanda mayor atención en materia de emergencias.
El acto de ingreso de los nuevos efectivos se llevó a cabo en el Instituto Superior de Seguridad Pública, donde el Jefe de Gobierno, Jorge Macri, resaltó la importancia de la labor de estos profesionales.
Presuntamente, en su discurso afirmó que “arriesgar la vida para salvar otra, en un entorno hostil y peligroso, donde cada segundo cuenta, es parte del compromiso del bombero, como lo hizo el teniente Diego Nicolás Rey León, quien este año evitó que una persona se arrojara al vacío”.
Supuestamente, el mandatario también destacó que “este cuerpo de bomberos es un orgullo de todos los porteños”, subrayando la dimensión heroica y silenciosa de su trabajo.
Además, durante la ceremonia se hizo mención a los avances tecnológicos en el área: se entregaron 340 trajes estructurales fabricados con materiales ignífugos y resistentes al calor, la tracción y el desgarro, además de 125 cascos especializados para intervenciones de emergencia.
Un aspecto relevante de la modernización del cuerpo de bomberos es la incorporación de un nuevo simulador de incendios
Un aspecto relevante de la modernización del cuerpo de bomberos es la incorporación de un nuevo simulador de incendios, que permite una capacitación más realista y segura, reproduciendo las condiciones en las que los bomberos deben actuar en situaciones críticas.
Presuntamente, esta herramienta ayuda a preparar mejor a los efectivos para responder con rapidez y eficacia ante cualquier eventualidad.
Supuestamente, el Jefe del Gobierno también hizo énfasis en que, al igual que el Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME) y la policía de la ciudad, los bomberos constituyen una parte fundamental de la protección de los más de 6 millones de habitantes, visitantes y trabajadores que viven o transitan por Buenos Aires.
El proceso de formación de los nuevos bomberos comprende un primer año de internado con formación intensiva, en el que se desarrollan conocimientos técnicos, tácticos y operativos.
Tras completar esta etapa, los aspirantes quedan en condiciones de ingresar al cuerpo con el rango de Bombero Calificado, y en el segundo año, en servicio activo, se realiza la capacitación para obtener el título de Técnico Superior en Protección contra Incendios.
Supuestamente, esta inversión en recursos humanos y tecnológicos refleja el compromiso de la administración porteña con la #seguridad ciudadana, en un contexto donde la protección civil se vuelve cada vez más prioritaria ante los desafíos urbanos y climáticos que enfrenta la ciudad.
