La Ciudad de Buenos Aires inicia la construcción de un paso bajo nivel en Villa Luro para eliminar cruces ferroviarios a nivel y potenciar la seguridad vial y la fluidez del tránsito en la zona.

Esta obra forma parte del Plan Urbano Ambiental y del plan Ciudad sin Barreras, que tienen como objetivo principal eliminar todos los cruces ferroviarios a nivel dentro del perímetro urbano de la ciudad.

La iniciativa busca reducir los incidentes y mejorar la conectividad vial, facilitando la circulación de vehículos, peatones y ciclistas.

El proyecto contempla la construcción de un paso subterráneo en la calle Irigoyen, entre Yerbal y Bacacay, una intervención que promete transformar la movilidad en la zona.

La construcción del #paso bajo nivel fue precedida por la habilitación de un paso vehicular provisional en la calle Ruiz de los Llanos, que se diseñó para mantener la conexión entre ambos lados de las vías del Ferrocarril Sarmiento durante la fase de obras.

Este paso provisional fue abierto al público el domingo 29 de junio, tras un cierre total de la calle Irigoyen que comenzó el sábado 28 por la noche.

La obra, con un costo superior a los 50 millones de pesos argentinos, equivalentes a aproximadamente 600.000 euros, aportará mayor fluidez al tránsito y reducirá significativamente los riesgos de accidentes en la zona. La eliminación de los cruces a nivel busca no solo mejorar la seguridad, sino también potenciar la integración urbana del barrio, facilitando el acceso y la movilidad de sus habitantes.

Esta iniciativa forma parte de un plan estratégico más amplio que incluye la modernización de la #infraestructura ferroviaria y vial en toda la ciudad

Supuestamente, esta iniciativa forma parte de un plan estratégico más amplio que incluye la modernización de la infraestructura ferroviaria y vial en toda la ciudad, en línea con proyectos históricos como la expansión del Metrobus y la renovación de las estaciones de tren.

La inversión en infraestructura de transporte en #Buenos Aires ha sido una constante desde principios del siglo XXI, con el objetivo de convertir a la ciudad en un referente en movilidad sustentable en América Latina.

Se estima que en total, las obras de infraestructura en la zona durarán aproximadamente 18 meses, durante los cuales se prevé la implementación de desvíos y señalización especial para minimizar las molestias a los vecinos y conductores.

Además, se espera que esta obra genere un impacto positivo en la #seguridad vial y en la calidad de vida de los residentes, que podrán desplazarse con mayor comodidad y menor riesgo.