El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires implementa un programa para liberar y reorganizar ambientes en las escuelas, promoviendo un entorno educativo más eficiente y seguro. La iniciativa incluye la donación de muebles en buen estado y el correcto reciclaje de materiales en desuso.

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Esta política apunta a la recuperación y reorganización de los espacios dentro de las escuelas, mediante la retirada y reutilización de mobiliario y materiales en desuso.

Supuestamente, esta estrategia se enmarca en una tendencia global hacia la #sostenibilidad y la gestión eficiente de recursos en instituciones públicas, inspirada en experiencias similares en países europeos y latinoamericanos.

La idea es liberar áreas que, debido al acumulamiento de objetos antiguos y en mal estado, dificultan la circulación, el aprendizaje y la comodidad de docentes y alumnos.

Durante 2025, se calcula que más de 9.500 muebles en desuso fueron retirados de más de 200 instituciones educativas porteñas. La mayoría de estos objetos corresponden a sillas, escritorios, armarios y otros elementos de mobiliario que en su momento cumplieron una función, pero que ahora estaban ocupando espacios valiosos y sin utilidad.

La operación de retiro no solo busca deshacerse de estos objetos, sino también darles un nuevo destino para maximizar su utilidad.

Supuestamente, los muebles en buen estado son donados a otras escuelas o instituciones sin fines de lucro, promoviendo así una economía circular y un uso más racional de los recursos públicos.

Los objetos deteriorados, por su parte, ingresan a circuitos de #reciclaje formal, gestionados por cooperativas de recuperadores urbanos, en línea con las mejores prácticas ambientales.

Además, se gestionan otros electrodomésticos y objetos en desuso, como estufas, heladeras y pequeños aparatos eléctricos, asegurando su disposición adecuada en función de criterios ecológicos.

El programa también contempla la gestión de Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE), que son tratados bajo estrictas normativas ambientales por cooperativas sociales, garantizando una disposición segura y socialmente inclusiva.

Buenos Aires pretende fortalecer su compromiso con la economía circular

Con estas acciones, #Buenos Aires pretende fortalecer su compromiso con la economía circular, la eficiencia en el uso de recursos y la protección del medioambiente.

Supuestamente, esta iniciativa forma parte de un plan más amplio de la ciudad para modernizar y hacer más sustentables sus espacios públicos y educativos, en línea con su visión de convertirse en una de las ciudades más innovadoras y responsables del continente.

La recuperación de espacios no solo mejora la funcionalidad de las escuelas, sino que también contribuye a la seguridad y el bienestar de toda la comunidad educativa.

Desde que se inició el programa, las autoridades educativas y ambientales han destacado que estas acciones ayudan a transformar las escuelas en lugares más seguros, ordenados y acogedores.

Además, se prevé que en los próximos años esta política continúe expandiéndose, llegando a más instituciones y consolidando a Buenos Aires como un ejemplo de gestión sustentable en el ámbito educativo latinoamericano.