La Ciudad Autónoma de Buenos Aires implementa un proceso simplificado y ágil para gestionar licencias de conducir, permitiendo a los vecinos obtener o renovar su documentación en aproximadamente una hora, tanto en modalidad digital como presencial.

Imagen relacionada de nueva normativa en ciudad de buenos aires facilita la obtencion y renovacion de licencias de conducir en tiempo record

Según supuestamente fuentes oficiales, esta innovación busca facilitar el acceso a la documentación vial, reducir los tiempos de espera y fortalecer los controles de seguridad en el tránsito urbano.

El proceso comienza de forma digital a través de la página web oficial del Gobierno de la Ciudad, donde los interesados deben completar una serie de requisitos y presentar la documentación requerida.

Tras ello, el trámite finaliza en una sede habilitada, donde los vecinos se someten a evaluaciones psicofísicas y habilidades conductivas con profesionales especializados.

Este método, que supuestamente combina tecnología avanzada y recursos humanos calificados, ha sido diseñado para garantizar que cada conductor cumpla con los estándares necesarios para circular de forma segura.

Supuestamente, el sistema ha sido desarrollado en respuesta a la creciente demanda de trámites más ágiles y eficientes, además de promover la #seguridad vial mediante controles estrictos.

Cada sede cuenta con un circuito de postas donde se realizan las evaluaciones, incluyendo un examen en circuito en la vía pública con autos doble comando equipados con cámaras y sensores telemétricos en tiempo real.

Estos vehículos permiten que el proceso sea transparente y verificado desde un centro de monitoreo, asegurando que los resultados sean precisos y confiables.

En cuanto a las categorías de licencias, en la Ciudad se diferencian claramente los usos particulares y profesionales. Las licencias particulares (clases A, B y G) son para quienes manejan motos, autos o vehículos adaptados para uso personal, y tienen una vigencia de hasta 10 años para conductores de entre 16 y 39 años.

Para conductores mayores, los plazos de renovación disminuyen progresivamente, siendo de 6 años para quienes tienen entre 40 y 49 años, 4 años para los de 50 a 69 años, y cada 2 años para mayores de 70.

Por otro lado, las licencias profesionales (clases C, D y E) aplican a conductores que desempeñan actividades laborales, como transporte de pasajeros, carga o maquinaria pesada.

Estas tienen vencimientos que varían entre 2 y 5 años, dependiendo del tipo de vehículo y la edad del conductor. Presuntamente, esta diferenciación permite aplicar niveles de exigencia acordes a la responsabilidad y riesgo asociados.

Un aspecto innovador del sistema es la implementación de evaluaciones en circuitos específicos en la vía pública para la categoría B1, que habilita a conducir automóviles livianos.

El uso de autos doble comando con cámaras y sensores permite monitorear en tiempo real las maniobras del conductor, garantizando que cumpla con los requisitos y promoviendo la convivencia vial.

Además, en reciente actualización, se rediseñaron circuitos y procesos de evaluación para motos, incluyendo una revisión en la pista de la avenida Roca y mejoras en las maniobras requeridas.

El proceso de obtención o renovación puede realizarse en cualquiera de las 19 sedes habilitadas en la Ciudad, y también con la asistencia de Boti, el asesor virtual del Gobierno, a través de WhatsApp en el número 11 5050 0147.

Solo hay que escribir la palabra “licencia de conducir” y seguir las instrucciones para completar el trámite.

Prácticos y psicofísicos en prestadores autorizados por la Agencia Nacional de Seguridad Vial

Supuestamente, en casos de licencias vencidas por más de un año, los conductores deben iniciar un trámite completo, que incluye rendir exámenes teóricos, prácticos y psicofísicos en prestadores autorizados por la Agencia Nacional de Seguridad Vial, ya que las licencias interjurisdiccionales para transporte de larga distancia tienen requisitos específicos.

La Ciudad también ha establecido que las licencias particulares tienen una vigencia máxima de 10 años, pero esta varía según la edad del conductor y la categoría.

Por ejemplo, para quienes tienen entre 40 y 49 años, la renovación debe hacerse cada 6 años, mientras que para mayores de 70 años, cada 2 años, con revisiones psicofísicas obligatorias.

Este esquema de gestión busca potenciar la seguridad vial y reducir accidentes, ya que la Ciudad de Buenos Aires, supuestamente, mantiene los más altos estándares en evaluaciones psicofísicas, que incluyen visión, audición, psicología y aptitudes físicas.

Todo esto, en línea con los esfuerzos nacionales e internacionales por mejorar la movilidad segura, promoviendo una cultura vial responsable.