El Gobierno de Buenos Aires continúa con obras de readoquinado para mejorar la circulación y preservar calles de valor patrimonial en la ciudad, con un ambicioso plan que ya ha intervenido en varias cuadras este año.
El gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires mantiene firme su compromiso con la mejora de la infraestructura urbana a través de un plan de readoquinado que busca optimizar la seguridad vial y conservar el carácter histórico de sus calles.
Desde principios de 2025, ya se han finalizado obras en 19 cuadras y actualmente hay 12 en proceso, en línea con la meta de intervenir un total de 88 cuadras durante el año.
Este programa de mantenimiento y recuperación de calles con calzada de granito o granitullo responde a la necesidad de preservar el patrimonio arquitectónico y cultural de la ciudad, al tiempo que se fomenta una circulación más segura y ordenada.
La iniciativa forma parte de las políticas de urbanismo que buscan mejorar la calidad de vida de los vecinos y visitantes, además de proteger el valor histórico de determinadas zonas.
Según explicó Ignacio Baistrocchi, ministro de Espacio Público e Higiene Urbana, “el readoquinado nos permite realizar un mantenimiento adecuado de estas calles sin alterar su material original.
Reutilizamos los adoquines existentes para mantener la identidad y durabilidad, asegurando a la vez que las calles tengan buenas condiciones para circular”.
La técnica utilizada consiste en retirar los parches de asfalto en caso de existir, levantar los adoquines, nivelar y compactar la base antes de volver a colocar los adoquines originales.
Este proceso, que respeta la estética y estructura original, se realiza en calles que mantienen su fisonomía barrial o que necesitan reducir la velocidad del tránsito, como zonas cercanas a escuelas y plazas.
El uso de adoquines de piedra natural, ya sea granito o granitullo, es una tradición que data de principios del siglo XX en Buenos Aires. Estas calles, caracterizadas por su resistencia y aspecto distintivo, forman parte del patrimonio urbanístico de la ciudad. Algunas de las calles intervenidas en los últimos meses incluyen José León Suárez, José Pedro Varela, José Luis Cantilo, Asunción, Ladines, Plaza, Artilleros, Valle, Bucarelli, Santos Dumont, Tomás A.
Le Bretón, Balcarce y Soria.
Las obras en ejecución actualmente abarcan zonas como Naón Rómulo, José Luis Cantilo, Cotagaita, Goncalves Dias, Thompson, Santo Tomé, Condarco, y otras en la zona de Totoral y Cucha Cucha.
Estas tareas, si bien son fundamentales para el mantenimiento vial, pueden afectar la circulación vehicular en las áreas intervenidas, por lo que se recomienda a los vecinos planificar sus desplazamientos con anticipación.
Este plan de readoquinado no solo busca mejorar la seguridad y durabilidad de las calles, sino también respetar y mantener vivo el patrimonio histórico de Buenos Aires.
La ciudad cuenta con una larga tradición en conservación de sus calles de adoquines, que en el pasado sirvieron como principales arterias de comunicación y transporte, y que hoy en día representan un valioso legado cultural.
Se estima que las obras de este año continuarán en los próximos meses, con una inversión que, en euros, representa millones destinados a la recuperación urbana.
La iniciativa refleja el compromiso de la administración porteña con un urbanismo sostenible y respetuoso de sus raíces, promoviendo una ciudad más segura, estética y consciente de su historia.
En conjunto, este plan de reurbanización vial reafirma la importancia de cuidar el patrimonio arquitectónico y mejorar la movilidad urbana, aspectos fundamentales para una ciudad que busca equilibrar su desarrollo con la conservación de su identidad cultural y su historia.
La intervención en las calles de Buenos Aires es un paso más hacia una ciudad más bonita, segura y respetuosa de su pasado.
