La ciudad de Zaragoza inicia las operaciones de su primera biorrefinería, que transformará residuos en productos sostenibles y de alto valor añadido.

Zaragoza ha dado un paso significativo hacia la sostenibilidad al abrir su primera biorrefinería, un proyecto pionero que se enmarca dentro de la iniciativa CIRCULAR BIOCARBON. Esta biorrefinería, gestionada por Urbaser, ha sido inaugurada recientemente y cuenta con una inversión de 23 millones de euros (aproximadamente 19 millones de euros), apoyada por el programa Horizonte 2020 de la Unión Europea.

El proyecto implica la colaboración de un consorcio formado por 11 entidades, que trabajarán conjuntamente en la valorización de los residuos orgánicos y de los lodos de depuración de aguas residuales.

Gracias a este innovador proceso, se generarán nuevos productos de alto valor añadido, como biopolímeros, biofertilizantes y grafeno verde, que contribuirán a una economía más circular y sostenible.

El acto de inauguración contó con la presencia de autoridades del Ayuntamiento de Zaragoza, así como de los socios y colaboradores de CIRCULAR BIOCARBON, quienes se reunieron en el Centro de Tratamiento de Residuos Urbanos de la ciudad, donde se encuentra ubicada la biorrefinería.

Durante el evento, la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, destacó la importancia de este proyecto para la economía circular de la ciudad y cómo este se alinea con la visión de crear ciudades sostenibles y saludables.

"Zaragoza se convierte una vez más en un referente en economía circular.

Este proyecto no solo generará empleo y crecimiento económico, sino que también ayudará a reducir los residuos enviados a los vertederos", afirmó Chueca.

La biorrefinería es un modelo único que implementa sus procesos en dos ubicaciones diferentes: Zaragoza, España, y Sesto San Giovanni, Italia.

Esta estrategia multisitio permitirá evaluar la eficacia de la biorrefinería en distintos contextos de gestión de residuos y sistemas industriales, lo que podría facilitar su replicabilidad en otras regiones de Europa.

Este avance se enmarca en el contexto del Plan de Acción para la Economía Circular de la Unión Europea, adoptado en 2020, que busca encontrar nuevas formas de valorizar los residuos y fomentar su reciclaje.

Cabe mencionar que los residuos biodegradables son una fuente significativa de emisiones de gases de efecto invernadero, por lo que proyectos como este son cruciales para mitigar el cambio climático.

Fernando Abril-Martorell, CEO de Urbaser, subrayó que esta inauguración es un hito importante tanto para el proyecto CIRCULAR BIOCARBON como para la compañía.

"La nueva biorrefinería destaca la transición hacia una bioeconomía circular, utilizando innovaciones para transformar los residuos en materiales sostenibles", explicó. A su vez, Nicoló Giacomuzzi-Moore, director ejecutivo de CBE JU, mencionó la relevancia de este acontecimiento y su potencial para establecer un nuevo estándar europeo en circularidad.

La biorrefinería no solo creará empleo local, sino que también impulsará el crecimiento ecológico y el uso responsable de los recursos.

La biorrefinería producirá una variedad de productos que van desde recubrimientos de consumo directo, bolsas compostables, hasta abonos bioestimulantes.

Esto beneficiará tanto a la industria como a los consumidores finales, marcando un paso adelante en la integración de soluciones sostenibles en la economía regional.