El Ayuntamiento de Zaragoza lanza un plan de seguridad vial en el área de la antigua fábrica de Giesa mientras se desarrollan importantes obras que incluyen la creación de un ecosistema audiovisual y viviendas asequibles.

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El consistorio de Zaragoza ha decidido implementar un destacado plan de seguridad vial en la zona de la antigua fábrica de Giesa, en el marco de las obras del proyecto Distrito 7.

Esta iniciativa contempla una inversión de 18,3 millones de euros (aproximadamente 15,6 millones de euros) para revitalizar estas instalaciones históricas y establecer un ecosistema audiovisual que responda a las necesidades del sector creativo, que había tenido que buscar alternativas fuera de la ciudad para operar.

Además de la rehabilitación de Giesa, se está proyectando la construcción de un edificio con 140 viviendas y garajes que se ofrecerán en régimen de alquiler asequible.

Este nuevo desarrollo es parte de un enfoque más amplio que busca satisfacer la creciente demanda de vivienda en Zaragoza, donde se están impulsando un total de 1.700 unidades.

Para asegurar la seguridad de los peatones y mitigar los impactos derivados de las obras, el Ayuntamiento ha diseñado un plan específico que cuenta con la participación de los técnicos del Área de Movilidad y la Policía Local.

Este plan ha sido comunicado a los 950 miembros de la comunidad educativa del cercano colegio Maristas-Bajo Aragón, así como a los residentes del área a través de una campaña informativa.

La semana próxima, se llevará a cabo una reunión con las asociaciones de los barrios de Las Fuentes, Montemolín y San José para discutir los detalles del proyecto.

Durante la duración de las obras, la Policía Local incrementará su presencia en la zona, realizando labores de control y vigilancia para garantizar la seguridad en los accesos al centro educativo y el área de construcción.

Entre las medidas adoptadas para garantizar la seguridad, se ha decidido restringir el acceso a la Plaza de Vicente Cazcarra por el andador Francisco Rodrigo.

Se cerrará el acceso a la plaza desde dicho andador, dejando una puerta de doble hoja para emergencias. Asimismo, se prohibirá el paso a la calle Pepa Cobos entre Vicente Cazcarra y Padre Chaminade, aunque se garantizará el acceso peatonal al portal existente en Pepa Cobos.

Las aceras adyacentes también verán restricciones, con el cierre del tránsito peatonal en secciones de las calles Yolanda de Bar y San Joaquín. Esto obligará a la reubicación de varios pasos de peatones y la anulación de algunos existentes, mientras que se habilitarán pasos provisionales en nuevas ubicaciones para mantener la accesibilidad.

El estacionamiento en varias calles también se verá afectado, con la prohibición de estacionar en tramos específicos para facilitar el desarrollo de las obras.

Se habilitarán nuevas zonas de estacionamiento en otros lugares para compensar esta pérdida.

Por otro lado, se están implementando rampas de hormigón en las zonas de acceso a los pasos de peatones provisionales para mejorar la accesibilidad y asegurar que todas las personas puedan transitar de manera segura.

El horario de las obras se ha establecido entre las 7:30 y las 19:00 horas, comenzando con los trabajos de hormigonado a partir de las 8:00. Con estas acciones, se espera que las molestias sean mínimas para el colegio Marianistas Bajo Aragón, ya que se han diseñado rutas alternativas para el tránsito de camiones y se han tomado medidas para mejorar la visibilidad en los pasos de peatones cercanos.

En resumen, el Ayuntamiento de Zaragoza no solo busca transformar un espacio industrial en un centro creativo, sino que también está comprometido con la seguridad y bienestar de la comunidad durante el proceso de desarrollo urbanístico.