Zaragoza sigue avanzando en su camino hacia la neutralidad climática y se posiciona como una de las 100 ciudades europeas comprometidas con este objetivo.

Recientemente, el Ayuntamiento de Zaragoza ha sido galardonado con el sello-misión otorgado por la Comisión Europea, reconociendo la calidad y la viabilidad de los compromisos y planes expuestos en el acuerdo.

Este reconocimiento supone un hito importante para Zaragoza, ya que le permitirá desbloquear sinergias con programas de financiación de la UE y otros fondos y recursos financieros.

Además, el sello-misión proporcionará beneficios concretos a la ciudad, como un acceso ágil y preferente a convocatorias europeas y a fondos del Banco Europeo de Inversiones.

La consejera de Hacienda y Fondos Europeos, Blanca Soláns, ha expresado que este logro es un nuevo reconocimiento a la trayectoria de Zaragoza en la Misión Europea Net Zero Cities, así como a la calidad y viabilidad de sus compromisos y proyectos en el ámbito climático.

Esta distinción facilitará el acceso del Ayuntamiento y sus socios a financiación pública y privada favorable para llevar a cabo acciones sostenibles.

El sello-misión también permitirá a Zaragoza obtener ventajas en el acceso a financiación proveniente de programas de fondos europeos, complementarios a los fondos Next Generation que financian las acciones del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

Además, transmitirá confianza a los inversores privados interesados en proyectos alineados con la misión de neutralidad climática.

La Misión Europea de Ciudades Climáticamente Neutras tiene como objetivo acelerar la transformación de las ciudades para cumplir con el Acuerdo de París y la Agenda 2030. Esto a su vez contribuye al Pacto Verde Europeo y avanza hacia la neutralidad climática antes de 2050.

Zaragoza se sitúa en un puesto de liderazgo en la transición energética de las grandes ciudades.

La ciudad está implementando diversas medidas para electrificar el transporte público, cumplir con las directivas europeas de descarbonización, promover la rehabilitación energética de viviendas y mejorar la gestión de residuos y la red de saneamiento.

Esta distinción refuerza la posición de Zaragoza como una ciudad comprometida con la sostenibilidad y capaz de atraer inversiones y talento para impulsar políticas innovadoras en línea con la transición energética y la protección del medio ambiente.

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