
En un encuentro disputado en el Gigante de Arroyito, River Plate logró una victoria de 1-0 frente a Racing Club, asegurando su pase a las semifinales de la Copa Argentina. El partido estuvo marcado por un juego directo, mucha pasión y un escenario de intensa confrontación física, donde la estrategia y el carácter jugaron un papel fundamental.