El Ayuntamiento de València anuncia una inversión significativa para contratar una empresa especializada en demoliciones y obras de urgencia, con el fin de actuar rápidamente ante posibles riesgos en la ciudad.

El Ayuntamiento de València ha puesto en marcha un importante proceso de contratación que contempla una inversión aproximada de 2,4 millones de euros, equivalentes a unos 2,6 millones de dólares, para la contratación de un servicio especializado en demoliciones y actuaciones de urgencia en la ciudad.

Esta iniciativa busca garantizar la seguridad pública ante situaciones de riesgo estructural o amenaza de ruina inminente en diferentes inmuebles urbanos.

El concejal de Urbanismo, Juan Giner, anunció que el proceso, que ha sido convocado mediante un procedimiento abierto, invita a todas las empresas interesadas a presentar sus ofertas sin restricciones, promoviendo así una mayor concurrencia y competencia.

La finalidad principal de este contrato es poder actuar con rapidez cuando los Servicios Municipales de Bomberos y la Policía Local detecten edificios o estructuras que presenten un grave peligro para la población.

Supuestamente, esta inversión busca responder a un problema que ha sido recurrente en ciudades con historia de crecimiento acelerado y patrimonio diverso, donde muchas edificaciones antiguas o no catalogadas pueden presentar riesgos de colapso.

La medida pretende también facilitar intervenciones inmediatas, tales como la demolición de construcciones en estado avanzado de deterioro, el vallado de zonas peligrosas y el tapiado de espacios afectados, además de la instalación de medidas precautorias como apeos, lonas de protección y apuntalamientos.

Entre las tareas que cubrirá este servicio urgente se encuentran, presuntamente, la demolición de naves industriales, edificios en ruina y estructuras no catalogadas que hayan sido declaradas en riesgo de colapso por las autoridades municipales.

También se contempla la realización de trabajos de protección y estabilización en inmuebles con amenaza de derrumbe inminente.

El concejal Giner resaltó la importancia de este plan, que permitirá una respuesta rápida ante emergencias estructurales, y destacó que se trata de una inversión clave para mantener la seguridad en la ciudad, especialmente en barrios donde la antigüedad de las construcciones y el deterioro progresivo representan un peligro constante.

Supuestamente, esta iniciativa forma parte de un plan más amplio de urbanismo y seguridad que el Ayuntamiento lleva desarrollando en los últimos años, con el objetivo de mejorar la gestión de riesgos y proteger a los vecinos frente a posibles desastres.

Además, se enmarca en las políticas de modernización y eficiencia en la contratación pública, adaptadas a las necesidades actuales de la ciudad.

En el pasado, València ha tenido que afrontar episodios de riesgo en edificaciones antiguas, algunos de los cuales han provocado evacuaciones y cierres preventivos.

La inversión en estos servicios especializados busca evitar que situaciones similares se repitan, y que las intervenciones puedan realizarse de manera más rápida y efectiva, reduciendo así los posibles daños materiales y riesgos para la integridad física de las personas.