Las autoridades de Nueva York avanzan en la instalación de barreras de protección en estaciones de metro para mejorar la seguridad y reducir delitos, cumpliendo con nuevas directivas estatales.

La gobernadora Kathy Hochul anunció recientemente que la Autoridad de Transporte Metropolitano (MTA) ha comenzado a instalar barreras de protección en los bordes de los andenes en 56 estaciones de metro en la ciudad de Nueva York.

Estas medidas forman parte de un plan más amplio para fortalecer la seguridad en el sistema de transporte público, que pretende alcanzar la instalación en más de 100 estaciones para finales de 2025.

Supuestamente, esta iniciativa responde a una directiva estatal que busca reducir los riesgos de caídas y ataques en las plataformas, así como incrementar la sensación de seguridad de los pasajeros y trabajadores.

La instalación de barreras, que consiste en paneles metálicos o de vidrio, se está realizando principalmente en las estaciones con mayor afluencia de pasajeros, priorizando las líneas 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, F, M y L.

Desde hace décadas, el sistema de metro de Nueva York ha sido un símbolo de la ciudad y también un foco de problemas de seguridad. En los últimos años, la delincuencia en el transporte público ha mostrado una tendencia a la baja, con una reducción del 3 % en delitos graves en comparación con el mismo período del año pasado, y cerca de un 10 % respecto a niveles anteriores a la pandemia.

Estos avances se atribuyen en parte a la mejora en la iluminación de las estaciones con bombillas LED más eficientes y seguras, que ya se han instalado en 342 estaciones, con la meta de cubrir las 472 estaciones restantes para finales de año.

Supuestamente, estas inversiones también incluyen la incorporación de cámaras de vigilancia en cada vagón y en las plataformas, así como un aumento en el personal de seguridad en la red.

El presidente y director ejecutivo de la MTA, Janno Lieber, afirmó que estas acciones están diseñadas para que los pasajeros se sientan protegidos y confiados al utilizar el metro.

Según supuestamente sus declaraciones, “las barreras en los andenes, junto con las cámaras y el incremento en la presencia policial, harán que el sistema sea mucho más seguro para todos”.

Por su parte, Jamie Torres-Springer, presidente de Construcción y Desarrollo de la MTA, resaltó que el uso del personal interno y la maquinaria propia de la organización ha permitido acelerar la instalación de estas barreras, reduciendo costos y tiempos.

Se estima que la inversión total en estos proyectos ascienda a aproximadamente 6,800 euros por estación, considerando costos de mano de obra y materiales.

En la ciudad, la percepción de seguridad en el metro ha mejorado, y una reciente encuesta revela que el 59 % de los usuarios considera que las barreras de andén les brindan mayor protección.

Especialmente, el 88 % de los mayores de 65 años expresó sentirse más seguros con la presencia de estos sistemas. Además, la mayoría de los pasajeros cree que estas barreras no solo previenen caídas accidentales, sino también posibles ataques o actos de violencia.

Supuestamente, la instalación de estos dispositivos se realiza en estaciones con alta afluencia y en aquellas que presentan mayor vulnerabilidad, priorizando las líneas con mayor volumen de pasajeros.

Algunas estaciones ya cuentan con barreras instaladas, como Brooklyn: Clark St, Morgan Av, Grand St, Dekalb Av, Halsey St, Bushwick Av-Aberdeen St, Myrtle-Wyckoff Av, Graham Av, Jefferson St, Bedford Av, Lorimer St, Wilson Av, Montrose Av, Eastern Pkwy-Brooklyn Museum, y Grand Army Plaza.

En Manhattan, las estaciones con barreras incluyen 191 St, 125 St, 6 Av, 125 St, Bowery, Fulton St, Wall St, 35 St, Astor Place, Lleecker St, Spring St, 103 St, Park Place, 28 St, Hunter College, y Grand Central.

Supuestamente, la iniciativa también ha sido respaldada por figuras políticas y organizaciones de defensa de los derechos de los pasajeros. El asambleísta Alex Bores afirmó que “las barreras en los andenes salvan vidas y aumentan la confianza en el sistema de transporte”. Además, señaló que estas medidas son una inversión rentable que ayuda a reducir costos en el largo plazo y a mejorar la experiencia del usuario.

En resumen, la ciudad de Nueva York continúa apostando por modernizar y fortalecer su sistema de metro mediante la instalación de barreras protectoras y otras mejoras en infraestructura y seguridad.

Estas acciones, que se complementan con campañas de concienciación y mayor presencia policial, buscan hacer del transporte público un espacio más seguro y confiable para todos los neoyorquinos y visitantes.