El estado de Nueva York destina más de 17 millones de euros para modernizar los departamentos de policía en Western New York, incluyendo innovadores equipos tecnológicos que mejoran la seguridad ciudadana y optimizan las operaciones policiales.

En un esfuerzo por fortalecer la seguridad en Western New York, el gobernador Kathy Hochul anunció hoy una inversión estatal de aproximadamente 17 millones de euros destinados a la modernización tecnológica de las agencias policiales en la región.

La visita a la comisaría de policía del municipio de Tonawanda sirvió para mostrar los avances que se están logrando gracias a estos fondos, que en total suman cerca de 111 millones de euros distribuidos a nivel estatal.

Esta inversión, que llega en un momento en que la criminalidad demanda respuestas más eficaces, busca dotar a las fuerzas del orden de herramientas de última generación para mejorar la protección de los residentes y la eficiencia en sus operaciones.

Supuestamente, estos fondos permiten la adquisición de tecnología avanzada como escáneres 3D para documentar escenas del crimen y accidentes, sistemas de realidad virtual para entrenamiento policial, y nuevos equipos de comunicación.

En total, 378 departamentos en todo el estado están recibiendo recursos, y en la región de Western New York, específicamente, se destinan cerca de 17 millones de euros, de los cuales la policía de Tonawanda ha recibido aproximadamente 640,000 euros.

Esta cantidad ha sido utilizada para implementar dispositivos y sistemas que facilitan investigaciones y fortalecen la respuesta policial ante delitos.

El gobernador Hochul destacó que, gracias a estas inversiones, las tasas de criminalidad en Erie County han mostrado una tendencia a la baja: los delitos de índole violenta han disminuido en un 14%, mientras que los tiroteos en la ciudad de Buffalo han caído un 22%.

Estos resultados positivos reflejan el impacto directo de la modernización tecnológica y la mayor dotación de recursos a las fuerzas policiales.

Entre las innovaciones que ya están en marcha se incluyen drones de vigilancia, cámaras de alta definición, cascos con sistemas de comunicación avanzada y las mencionadas escáneres 3D, que en sólo cuatro minutos pueden recopilar miles de datos y crear réplicas precisas de escenas del crimen.

Esto permite a los investigadores realizar análisis forenses detallados sin necesidad de volver repetidamente al lugar, preservando evidencia frágil y facilitando una presentación visual en los juicios, lo cual representa un avance significativo en la resolución de casos complejos.

Presuntamente, estos fondos también permiten la implementación de programas de prevención y control del crimen, como iniciativas contra la violencia armada, programas de alcance comunitario y servicios de salud mental.

En particular, se ha destinado cerca de 16 millones de euros para fortalecer estos programas en todo el estado, con un enfoque especial en reducir la violencia relacionada con armas y en ofrecer apoyo psicológico a las víctimas y a quienes están en riesgo.

Supuestamente, uno de los aspectos clave en la estrategia del gobernador ha sido la actualización de leyes y procedimientos judiciales para hacer frente a las nuevas modalidades delictivas.

Esto incluye leyes más estrictas para la posesión y uso de armas, así como reformas en las leyes de descubrimiento y presentación de evidencias, con el objetivo de reducir la tasa de casos desestimados por tecnicismos legales.

Además, se han reforzado las leyes de advertencia temprana, conocidas como “red flag laws”, que permiten identificar y actuar preventivamente ante individuos que puedan representar un riesgo.

El gobernador también criticó las decisiones a nivel federal, donde supuestamente se han reducido recursos para la lucha contra el terrorismo y la vigilancia en línea, afectando la capacidad de las agencias locales para prevenir ataques o delitos graves.

En contraste, en Nueva York se continúa apostando por una inversión significativa en recursos y tecnología, con casi 3 mil millones de euros destinados a la seguridad pública en los últimos cuatro años.

En conclusión, la visita de Hochul a Tonawanda reafirma el compromiso del estado con la modernización policial y la protección de sus ciudadanos. La región de Western New York se posiciona así como un ejemplo de cómo la inversión en tecnología y leyes más estrictas pueden traducirse en comunidades más seguras y en una policía más preparada y eficiente.

La esperanza es que estos esfuerzos continúen expandiéndose, manteniendo a la región a la vanguardia en seguridad y justicia.