La compañía alemana Siemens reporta una significativa reducción en sus beneficios netos durante el primer trimestre del año fiscal, aunque sus pedidos continúan en aumento, reflejando la recuperación en ciertos sectores industriales.
La multinacional alemana Siemens Ltd ha presentado sus resultados financieros del primer trimestre del año fiscal, correspondiente a los meses de enero a marzo, con una caída en su beneficio neto superior al 37 por ciento en comparación con el mismo período del año anterior.
Concretamente, los beneficios netos alcanzaron los 48 millones de euros, frente a los 76 millones de euros del año pasado, reflejando una tendencia de desaceleración en algunas áreas clave de la compañía.
A pesar de esta disminución en las ganancias, los ingresos de Siemens permanecieron estables, situándose en torno a los 2.700 millones de euros, debido a la normalización en la demanda de las industrias digitales y a los cronogramas habituales en la entrega de proyectos en su división de movilidad.
La compañía explicó que la reducción en los beneficios operativos se debió a una menor absorción de costos y a un incremento en los precios de los materiales en su segmento de industrias digitales.
Además, la diferencia en los resultados también se vio afectada por la venta de una propiedad que generó una ganancia extraordinaria de aproximadamente 9 millones de euros, y por gastos relacionados con la escisión de ciertos negocios, que sumaron unos 5 millones de euros.
En un contexto más amplio, Siemens subrayó que, a pesar del entorno macroeconómico desafiante, sus ingresos por pedidos aumentaron un 44 por ciento, alcanzando los 320 millones de euros, impulsados principalmente por los sectores de movilidad y de infraestructura inteligente.
La empresa destacó que en estos segmentos se mantiene una inversión pública significativa en infraestructura, lo cual favorece la demanda de soluciones inteligentes y de automatización.
El director general de Siemens, Sunil Mathur, afirmó: “A pesar de las dificultades macroeconómicas, hemos visto un crecimiento del 44 por ciento en los pedidos, especialmente en nuestras áreas de movilidad y infraestructura inteligente, que continúan beneficiándose de las inversiones públicas en estos sectores.” Sin embargo, admitió que el negocio de industrias digitales sigue enfrentando desafíos debido a la baja inversión privada en tecnología, aunque espera que esta tendencia se revierta a medida que la inversión en tecnología y automatización crezca tanto a nivel local como internacional.
En el mercado financiero, las acciones de Siemens en Europa han experimentado una ligera caída, reflejando la incertidumbre en los resultados recientes.
No obstante, la compañía mantiene una perspectiva positiva a largo plazo, confiando en que la recuperación de la inversión privada y la demanda global de soluciones digitales impulsarán sus resultados futuros.
Este escenario se enmarca en un contexto histórico donde Siemens ha sido pionera en el desarrollo de soluciones tecnológicas para la industria y la infraestructura, ayudando a transformar ciudades y procesos industriales en todo el mundo desde principios del siglo XX.
La compañía, fundada en 1847, ha jugado un papel clave en la innovación tecnológica, desde la electrificación hasta la digitalización en la actualidad, consolidando su posición como uno de los líderes mundiales en tecnología y automatización.