Supuestamente, varios usuarios del Samsung Galaxy Ring han reportado que la batería de su dispositivo se hincha peligrosamente, causando lesiones y situaciones de emergencia. La compañía aún no ha ofrecido una solución definitiva, generando inquietud entre los propietarios del wearable.

En los últimos días, supuestamente, un problema técnico ha salido a la luz en relación con el Samsung Galaxy Ring, el primer pequeño dispositivo wearable lanzado por la compañía surcoreana en 2024.

Este dispositivo, que fue presentado como una alternativa a los relojes inteligentes para consultar información rápida sin tener que mirar constantemente la pantalla, ha generado preocupación entre los usuarios debido a un fallo en la batería que provoca su hinchazón.

Supuestamente, este problema ha afectado a varios propietarios, y uno de ellos, identificado como Daniel Rotar, compartió en redes sociales cómo la batería hinchada del Galaxy Ring le causó lesiones y lo llevó a urgencias médicas en Mumbai.

La historia se hizo viral, y muchos empezaron a cuestionar la seguridad del dispositivo.

El Samsung Galaxy Ring fue visto como una innovación en el mercado de los wearables, con un diseño compacto y funcionalidad avanzada, que supuestamente pretendía reemplazar ciertos aspectos de los relojes inteligentes convencionales.

Sin embargo, la reciente noticia de la batería hinchada ha puesto en jaque la percepción de seguridad del producto.

Según informes, el incidente ocurrió justo antes de que Rotar abordara un vuelo internacional. Al notar que el anillo se estaba hinchando, intentó quitarlo, pero la batería inflada dificultaba su extracción y supuestamente le causó dolor y daño en el dedo.

La situación se volvió de emergencia cuando el anillo, que contenía componentes con baterías de litio, supuestamente empezó a inflarse peligrosamente, y el riesgo de incendio creció, lo que llevó a Rotar a acudir rápidamente a la sala de urgencias.

La preocupación aumenta si se considera que, en casos similares, las baterías de litio que se hinchan pueden provocar incendios, explosiones o daños graves en la piel.

La compañía Samsung, por su parte, supuestamente no había previsto que un problema así pudiera afectar a sus dispositivos, y no se ha pronunciado oficialmente sobre la cantidad exacta de casos o sobre una posible campaña de retiro del producto.

El incidente también ha despertado la atención del público y de expertos en tecnología, quienes recuerdan que, en el pasado, otros dispositivos con baterías defectuosas han causado daños y han llevado a retiradas masivas en diferentes marcas.

La historia de Rotar, sin embargo, ha sido la más mediática hasta ahora, y ha generado debates sobre la seguridad en la fabricación de dispositivos con baterías integradas.

Supuestamente, algunos analistas consideran que este problema puede deberse a fallos en el proceso de fabricación o en la calidad de las baterías utilizadas.

Además, se presume que Samsung podría estar investigando la causa exacta, pero aún no ha emitido un comunicado oficial. La noticia ha llevado a que otros usuarios revisen sus dispositivos y cuestionen la seguridad del Galaxy Ring, el cual, hasta ahora, había sido promocionado como un gadget innovador.

Mientras tanto, Daniel Rotar ha declarado que no volverá a usar un anillo inteligente y que está tomando medidas para prevenir futuras lesiones. La comunidad tecnológica está a la espera de que Samsung ofrezca una solución definitiva y garantice la seguridad de sus productos en el futuro, ante la preocupación de que incidentes similares puedan repetirse.

La seguridad en los dispositivos wearables sigue siendo un tema crucial, especialmente cuando involucra componentes que contienen baterías de litio, cuya inflamabilidad puede representar un riesgo grave si no se manejan correctamente.