Citigroup anuncia una drástica reducción de su personal, buscando reforzar su tecnología interna y aumentar su eficiencia tras un escándalo financiero.
Nueva York, 17 de marzo: Citigroup, uno de los bancos más grandes de Estados Unidos, está planeando reducir su plantilla en un 30%. Esta decisión se enmarca dentro de un esfuerzo por disminuir su dependencia del personal de tecnología externa. Según informes recientes, la entidad bancaria busca evitar contratar terceros tras un fraude de 21 millones de euros y como parte de una estrategia más amplia para fortalecer su tecnología interna y abordar las preocupaciones regulatorias sobre la gobernanza de datos y la gestión de riesgos.
El recorte de personal en Citigroup tiene como objetivo ayudar a la empresa a centrarse en la contratación de más empleados dentro de sus filas, reduciendo así su dependencia de contratistas externos para operar.
Se ha sugerido que el gigante de la banca de inversión aumentará su plantilla en 2,000 empleados más en el área tecnológica en comparación con el año anterior.
En 2024, Citigroup contaba con 44,000 empleados y ahora el banco se propone alcanzar los 46,000.
En este contexto, Tim Ryan, el responsable de tecnología de Citigroup, informó al personal que los despidos de contratistas representarán alrededor del 20% de la fuerza laboral en el sector de TI, que actualmente cuenta con 50% de trabajadores externos.
Aunque el banco planea pronto reponer los roles al contratar nuevo personal, es probable que los puestos perdidos no sean ocupados nuevamente por la empresa.
Al abordar los despidos, Citigroup ha declarado que está ampliando sus capacidades internas para respaldar su estrategia y así mejorar la seguridad y solidez de sus operaciones.
Asimismo, argumenta que la reducción de puestos ayudará a aumentar los ingresos y a ser más eficiente como organización.
Por otro lado, se ha informado que Citigroup trasladará sus equipos de TI de Rutherford y Nueva Jersey a una nueva instalación en Jersey City. La razón detrás de la eliminación de estos contratistas externos fue la penalización regulatoria que enfrentó la compañía, que incluyó una multa de 127 millones de euros por deficiencias en la gobernanza de datos en 2024.
Esta reducción de la fuerza laboral se atribuye al reciente fraude de 21 millones de euros, que involucró a contratistas externos, poniendo de manifiesto los riesgos asociados con la subcontratación.
A lo largo de la historia, Citigroup ha enfrentado varios desafíos regulatorios y financieros, lo que ha llevado a la entidad a realizar ajustes significativos en su estructura organizacional.
La evolución del sector bancario y los constantes cambios en la tecnología han obligado a las instituciones financieras a adaptarse y reinventarse. En los últimos años, muchas empresas han optado por reducir su dependencia de contratistas externos, buscando así aumentar la eficiencia y la seguridad de sus operaciones internas.
Con este nuevo enfoque, Citigroup espera mantenerse competitivo en un mercado en constante evolución.