El XXXVI Concurso Internacional de Quesos Azules premia a los mejores productos de Cantabria, Valladolid y otras regiones, destacando su calidad en el ámbito global.

La semana pasada se llevó a cabo en el Ayuntamiento de Santander la ceremonia de entrega de los premios del XXXVI Concurso Internacional de Quesos Azules, uno de los certámenes más reconocidos a nivel mundial en el sector lácteo y quesero.

Este evento, organizado por la Cofradía del Queso en colaboración con el Ayuntamiento de Santander, ha logrado consolidarse en el calendario gastronómico internacional, sirviendo como plataforma para promover y potenciar la calidad de los quesos azules producidos en diferentes regiones de España y Europa.

El acto, presidido por el concejal de Protocolo, Álvaro Lavín, contó con la presencia de destacados profesionales del sector, incluyendo técnicos en quesería, maestros queseros, chefs de renombre, catadores especializados, sumilleres, periodistas gastronómicos y representantes del comercio minorista tanto en grandes superficies como en pequeños comercios.

Durante la ceremonia, Lavín expresó su satisfacción por la participación y la calidad de los productos presentados, subrayando que el concurso, que en esta edición recuperó su nombre tradicional en honor a Manuel Arroyo—una figura clave en la historia del queso en España—, busca reconocer la excelencia y promover la tradición quesera.

El concurso, celebrado el 20 de mayo, contó con la participación de los principales productores de quesos azules en España y Europa, representando las Denominaciones de Origen más relevantes.

La competencia tiene como objetivo no solo identificar los mejores quesos del mercado, sino también fortalecer los lazos entre los productores, la hostelería de alto nivel y el comercio especializado, fomentando así la innovación y la difusión de estos productos entre los consumidores.

Este certamen ha ganado reconocimiento en el ámbito internacional, considerando que los quesos azules tienen una larga tradición en la cultura gastronómica de países como Francia, Italia y España.

En particular, en Cantabria, la producción de quesos azules ha crecido en los últimos años, con queserías que apuestan por la calidad y la innovación, logrando posicionarse en los mercados internacionales.

En esta edición, el jurado, compuesto por expertos en quesería, chefs y críticos gastronómicos, decidió otorgar el primer premio a un queso llamado La Providencia, elaborado en Cantabria, cuya calidad y sabor han sido ampliamente reconocidos en el sector.

El segundo puesto fue para Javier Campo, también de Cantabria, conocido por sus quesos artesanales con denominación de origen. Finalmente, el tercer galardón fue para Carraca-Cantagrullas, una quesería de Valladolid que ha destacado por su innovación y tradición en la elaboración de quesos azules.

Estos premios no solo representan un reconocimiento a la calidad de los productos galardonados, sino que también sirven para impulsar su presencia en mercados internacionales, donde la demanda por quesos artesanales y de alta calidad continúa en crecimiento.

La tradición quesera en Europa tiene raíces que se remontan a la Edad Media, y quesos como el Roquefort, Stilton o Cabrales han sido siempre símbolos de la gastronomía de sus países, siendo ahora España un referente en la innovación y calidad en los quesos azules.

El concurso y sus premios ayudan a mantener viva esta tradición, incentivando a nuevos productores a seguir perfeccionando sus recetas y técnicas. La celebración de certámenes como este contribuye además a la economía local, promoviendo el turismo gastronómico y fortaleciendo las relaciones entre productores y consumidores.

La calidad y la historia de estos quesos siguen conquistando paladares y conquistando nuevos mercados, consolidando la posición de España en el panorama internacional de la producción quesera especializada.