El Día Infantil de Cantabria, declarado Fiesta de Interés Turístico Regional, reunió a familias y jóvenes en Santander para celebrar las tradiciones, la cultura y el folclore de la región en una jornada llena de actividades y eventos emblemáticos.
El Día Infantil de Cantabria, una de las festividades más arraigadas y esperadas en la región, se ha celebrado una vez más en Santander, con una jornada llena de actividades que buscan acercar a los más jóvenes las raíces, costumbres y valores que representan la identidad cántabra.
Organizado por el Ayuntamiento de Santander en colaboración con la Asociación para la Defensa de los Intereses de Cantabria (ADIC), este evento ha contado con la participación de numerosos ciudadanos y visitantes, consolidándose como una tradición que promueve la conservación del patrimonio cultural regional.
La celebración comenzó en la campa de La Magdalena con la marcha en albarcas, un calzado tradicional de la región, que simboliza la conexión con el pasado y las costumbres ancestrales.
Posteriormente, la alcaldesa de Santander, Gema Igual, procedió al izado de la bandera de Cantabria en un acto que marcó el inicio oficial de la jornada.
La alcaldesa resaltó la importancia de transmitir las tradiciones a las nuevas generaciones para mantener viva la cultura regional, subrayando que “Santander reafirma su compromiso con esta festividad que nos ayuda a recordar quiénes somos”.
Este evento, que ha sido declarado Fiesta de Interés Turístico Regional, busca celebrar y divulgar las tradiciones cántabras en un entorno festivo y familiar.
Durante todo el día, en la campa y en diversos espacios de la ciudad, se han desarrollado numerosas actividades dirigidas a niños y adultos. Entre ellas, destacan los talleres de creación de ojáncanos, pequeñas figuras tradicionales de la mitología cántabra, así como la elaboración de llaveros, imanes, y la participación en juegos tradicionales como el bolo palma.
Además, no faltaron las actuaciones musicales, con un recital de la Banda Municipal que llenó el ambiente de música popular. La gastronomía regional también tuvo su espacio en el mercado cántabro, donde más de 45 puestos ofrecieron productos típicos, artesanías, complementos y artículos de decoración.
El mercado, abierto hasta las 20:30 horas, contó con la presencia de tres organizaciones sin ánimo de lucro que vendieron productos a cambio de donaciones con certificados de aportación.
La jornada continuó con espectáculos de teatro de títeres, magia, cuentacuentos, y actividades lúdicas como el tiovivo ecológico y los hinchables, además de una chocolatada que atrajo a pequeños y mayores.
La celebración también incluyó un homenaje al Grupo de Danzas Virgen de las Nieves de Tanos y un pasacalle con los cabezudos de la mitología cántabra, personajes tradicionales que representan la riqueza cultural de la región.
Este evento tiene sus raíces en la primera edición, que se celebró el 4 de junio de 1978 en La Magdalena. En aquella ocasión, aproximadamente 80.000 personas participaron en la festividad, un éxito rotundo que motivó a las autoridades a instaurar esta celebración de forma anual, siempre coincidiendo con el primer domingo de junio.
Desde entonces, el Día Infantil de Cantabria se ha consolidado como una jornada para fortalecer el orgullo regional, promover el folklore y mantener vivas las tradiciones que definen a la comunidad cántabra.
A lo largo de los años, esta festividad ha evolucionado, incluyendo nuevas actividades y adaptándose a las generaciones más jóvenes, sin perder su esencia.
Hoy en día, representa un momento de encuentro, aprendizaje y disfrute para las familias, que participan activamente en la transmisión de la cultura de Cantabria a sus hijos.
La celebración del Día Infantil continúa siendo un símbolo del patrimonio cultural de la región y un recordatorio de la importancia de preservar las tradiciones para las futuras generaciones.