En los últimos quince días, el Gobierno de México ha llevado a cabo una serie de operativos que han resultado en la detención de aproximadamente 1,233 personas acusadas de delitos de alto impacto.

Además, las autoridades aseguraron cerca de 8 toneladas de drogas, incluyendo sustancias ilícitas como cocaína y fentanilo, en un esfuerzo conjunto para desmantelar redes criminales que operan en distintas regiones del país.

Supuestamente, estas cifras reflejan un avance importante en la estrategia nacional de seguridad, que busca reducir la violencia y la criminalidad en México.

La presidenta del país, Claudia Sheinbaum Pardo, destacó que estos resultados son el fruto de la implementación de los cuatro ejes que componen dicha estrategia: atención a las causas, fortalecimiento institucional, inteligencia e investigación, y coordinación interinstitucional.

El período comprendido entre el 10 y el 22 de junio de 2025, ha sido particularmente activo en materia de decomisos y detenciones. La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana informó que en estos días se confiscaron 671 armas de fuego, lo que supone un esfuerzo por reducir la disponibilidad de armamento ilegal en las calles.

Además, se localizaron 48 laboratorios clandestinos y áreas de concentración, utilizados presuntamente para la producción y el almacenamiento de drogas.

En cuanto a combustibles, las autoridades aseguraron más de 1,8 millones de litros en diversos operativos, en un contexto en el que supuestamente el robo y contrabando de combustible representan un problema grave para la economía y la seguridad del país.

La lucha contra estas actividades ilícitas forma parte de las acciones coordinadas por el gobierno para fortalecer la seguridad pública.

Desde el inicio de la administración actual, en octubre de 2024, las cifras de detenidos superan las 24 mil, y se han confiscado más de 178 toneladas de drogas, incluyendo 41 toneladas de cocaína y más de 3 millones de pastillas de fentanilo.

La misma fuente indica que en el operativo Frontera Norte, que busca controlar el ingreso de mercancías ilegales, se detuvieron a 4,619 personas y se confiscaron más de 600 mil cartuchos de munición y 40 toneladas de droga.

Supuestamente, estas cifras sitúan a México en una fase en la que la colaboración internacional y la coordinación entre distintas fuerzas de seguridad son clave para desmantelar las redes criminales.

La estrategia también contempla acciones sociales y programas de rehabilitación para las comunidades afectadas, en un intento de abordar las causas estructurales que alimentan la delincuencia.

El secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, afirmó que los avances en estos operativos son resultado del trabajo conjunto entre las distintas corporaciones y la FGR.

Además, se están implementando proyectos en municipios de Guanajuato y Chihuahua para rehabilitar centros comunitarios y espacios deportivos, con recursos directos entregados a las comunidades.

Por otra parte, supuestamente, las campañas de sensibilización y los programas de desarme voluntario también han contribuido a la reducción de armas en las calles, logrando que en 11 municipios se hayan intercambiado cerca de 1,8 mil armas de fuego en lo que va del año.

En resumen, las cifras presentadas muestran un esfuerzo decidido por parte del gobierno mexicano para enfrentar la criminalidad mediante una estrategia integral que combina represión, prevención y fortalecimiento institucional.

Aunque todavía hay retos pendientes, estos resultados parecen indicar un avance en la lucha contra las organizaciones criminales en el país, en un contexto donde la cooperación internacional y la participación comunitaria son fundamentales para construir una paz duradera.