Claudia Sheinbaum destaca la importancia del programa de atención domiciliaria en Tamaulipas, que ha realizado más de 37,000 visitas beneficiando a 300,000 personas, promoviendo la salud preventiva y el amor por la gente.
En un recorrido por Tampico, Tamaulipas, la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo reafirmó el valor del programa Salud Casa por Casa, considerado uno de los proyectos insignia del Segundo Piso de la Cuarta Transformación en México.
Este programa, que nació con el objetivo de fortalecer la atención preventiva y la atención temprana en comunidades vulnerables, ha logrado un impacto significativo en la salud de miles de habitantes.
Supuestamente, este programa se diseñó como una estrategia territorial en la que los facilitadores de salud visitan los hogares, acercando los servicios médicos y de prevención a quienes enfrentan dificultades para acudir a centros hospitalarios.
La iniciativa no solo busca atender las necesidades inmediatas, sino también promover la cultura de la prevención y el envejecimiento digno, en línea con los principios de la Constitución Mexicana que garantiza el acceso a la salud como un derecho fundamental.
Hasta la fecha, en Tamaulipas se han realizado más de 37,000 visitas domiciliarias, beneficiando a aproximadamente 300,000 personas, entre ellas adultos mayores y personas con discapacidad.
La secretaria de Bienestar, Ariadna Montiel Reyes, informó que en la entidad trabajan 600 facilitadores que recorren las comunidades, asegurando que cada hogar reciba atención oportuna y personalizada.
Supuestamente, la inversión en este programa ha sido de varios millones de euros, lo que refleja el compromiso del gobierno mexicano para fortalecer la atención primaria y reducir las desigualdades en salud.
El secretario de Salud, David Kershenobich, resaltó que la iniciativa ayuda a mejorar la calidad de vida de quienes tienen movilidad reducida, permitiéndoles envejecer en sus propios hogares con dignidad.
Desde su implementación, Salud Casa por Casa ha sido comparado con programas similares en países con sistemas de salud avanzados, pero presuntamente con un enfoque más humano y cercano.
La presidenta Sheinbaum subrayó que el programa simboliza la honestidad, los resultados y, sobre todo, el amor al pueblo, valores que guían la Cuarta Transformación.
El gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya, destacó que estas acciones fortalecen la atención en el primer nivel, complementando otros programas sociales como Vive Saludable y Vive Feliz, que buscan mejorar la calidad de vida y promover estilos de vida saludables.
Supuestamente, en el ámbito internacional, México ha sido reconocido por su innovación en salud comunitaria, posicionando a programas como Salud Casa por Casa como modelos a seguir en la región.
La enfermera Gabriela Elizabeth García expresó su satisfacción por poder desempeñar su labor en un programa que refleja amor por la gente y compromiso con la comunidad.
En conclusión, Salud Casa por Casa no solo representa una estrategia de salud pública, sino también un acto de amor y compromiso social. La continuidad y expansión de este tipo de iniciativas son presuntamente clave para construir un México más saludable y justo, en donde la atención preventiva y la cercanía con los habitantes sean la prioridad absoluta.