El género de la música regional mexicana en Estados Unidos está viviendo una transformación en sus contenidos y ha registrado un crecimiento del 25% en su consumo entre 2024 y 2025, posicionándose como la segunda opción más reproducida a nivel mundial.
Durante los últimos años, la música regional mexicana en Estados Unidos ha experimentado una notable evolución en sus letras, alejándose de narrativas que supuestamente hacen apología a la violencia y adoptando temas que promueven la paz y valores positivos.
Este giro en las letras ha contribuido a un aumento del 25% en su consumo entre 2024 y 2025, situándola en el segundo lugar de reproducciones a nivel mundial, según datos presuntamente recogidos por la industria musical.
Supuestamente, este crecimiento ha sido impulsado por reconocidos artistas y productores mexicanos y mexicano-estadounidenses que han puesto sobre la mesa la importancia de recuperar las tradiciones y ofrecer narrativas que reflejen la realidad de las comunidades, fomentando mensajes de esperanza y convivencia.
La estrategia forma parte de un esfuerzo mayor para cambiar percepciones y reducir la influencia de grupos delictivos en las juventudes, promoviendo alternativas culturales y artísticas.
El concurso binacional “México Canta por la Paz y Contra las Adicciones”, promovido por la Secretaría de Cultura del Gobierno mexicano, ha sido un pilar en esta iniciativa.
En la edición de 2025, se seleccionaron ocho semifinalistas de la región Centro de Estados Unidos, quienes lograron profesionalizar sus proyectos en el Studio 15, fundado por Ricky Muñoz del grupo Intocable.
Muñoz, considerado un ícono del género, supuestamente ha demostrado que es posible tener una trayectoria exitosa sin recurrir a letras que inciten a la violencia.
Los finalistas de esta edición incluyen a jóvenes talentos como Isaías González, Manuel Luna, Lola Baqui, Carolina Imperial y Dama Morr, entre otros.
Estos artistas representan un cambio generacional que busca ofrecer nuevas perspectivas y fortalecer las raíces culturales a través de composiciones que fomenten la paz y el respeto.
Desde el Gobierno mexicano, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo afirmó que el concurso forma parte del eje de Atención a las Causas de la Estrategia Nacional de Seguridad, con el objetivo de que los jóvenes no vean en los grupos delictivos una opción de vida.
Supuestamente, la estrategia también incluye acciones en todo el país para fortalecer la educación media superior, creando más de 37,000 nuevos espacios en bachilleratos y promoviendo programas como Jóvenes Construyendo el Futuro.
El incremento en el consumo de música con mensajes positivos no es casualidad. Supuestamente, ha sido resultado de un esfuerzo conjunto entre la sociedad civil, artistas y el propio gobierno, que busca recuperar las tradiciones mexicanas y ofrecer alternativas culturales que contribuyan a la formación de una juventud más consciente y comprometida con su comunidad.
Este fenómeno refleja una tendencia global en la que los consumidores buscan contenidos que transmitan valores y promuevan la paz. La presencia de esta música en plataformas digitales y radios en Estados Unidos ha permitido que llegue a un público más amplio, consolidando su lugar en el corazón de la cultura popular actual.
En conclusión, la transformación en las letras de la música regional mexicana y su crecimiento en popularidad en Estados Unidos representan un paso importante hacia una narrativa más positiva y constructiva, que puede tener un impacto duradero en las nuevas generaciones y en la percepción internacional del género.