Supuestamente, el gobierno de México ha implementado un decreto que facilita la regularización de concesiones de agua y recupera un volumen equivalente a cuatro veces el consumo de la Ciudad de México, beneficiando a pequeños productores agrícolas.

El Gobierno de México, a través de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), ha anunciado la presentación de un decreto que busca brindar facilidades administrativas a pequeños y medianos productores agrícolas en todo el país.

Este nuevo marco legal permitirá que aquellos agricultores con títulos de concesión de agua que hayan vencido entre el 1 de octubre de 2017 y el 1 de marzo de 2025 puedan regularizar su situación en un plazo de tres meses a partir de su publicación, simplificando los trámites y promoviendo la recuperación de recursos hídricos que, presuntamente, estaban en manos de concesionarios privados.

Supuestamente, durante los últimos años, la gestión del agua en México ha sido un tema de gran controversia, con acusaciones de privatización y uso indebido del recurso por parte de grandes empresas y sectores industriales.

La desprivatización de aproximadamente 4 mil millones de metros cúbicos de agua, que equivale a cuatro veces el consumo anual de la Ciudad de México, representa un acto histórico en la política hídrica del país.

La medida, que también incluye la devolución voluntaria de excedentes por parte de empresarios, busca devolver este vital recurso a la nación, reforzando la soberanía y sostenibilidad del agua en México.

El decreto no solo facilitará las regularizaciones, sino que también tendrá un impacto positivo en la economía rural, permitiendo que los pequeños productores tengan acceso a créditos, subsidios y programas de apoyo, así como certeza jurídica sobre sus derechos de uso del agua.

Según supuestamente datos de Conagua, en una revisión de más de medio millón de títulos, se detectó que 163 mil 689 estaban vencidos, lo que dificultaba la gestión eficiente del recurso y generaba incertidumbre entre los agricultores.

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, afirmó que esta iniciativa cumple con uno de los compromisos de campaña, que busca fortalecer al sector agrícola y garantizar el acceso equitativo al agua en todo el territorio nacional.

En su conferencia matutina, conocida como “Las Mañaneras del Pueblo”, destacó que la recuperación de estos 4 mil millones de metros cúbicos de agua supone un avance significativo hacia la sostenibilidad hídrica del país.

Por su parte, el director general de Conagua, Efraín Morales López, informó que ya se han iniciado obras en ocho de los 17 proyectos estratégicos establecidos en el Plan Nacional Hídrico, los cuales buscan ofrecer soluciones de largo plazo ante la crisis del agua.

Entre estos proyectos destacan la continuación de la segunda línea del acueducto Guadalupe Victoria en Tamaulipas, y el proyecto de agua para Colima.

Además, en próximas semanas comenzarán trabajos en obras como la Presa Tunal II en Durango y el acueducto La Cangrejera-Coatzacoalcos en Veracruz.

Supuestamente, en el marco de este plan, también se licitarán nuevas obras, incluyendo la Presa El Novillo en Baja California Sur, la desaladora de Rosarito y el sistema de presas para Hermosillo.

Estos esfuerzos buscan garantizar el abastecimiento de agua potable, reducir riesgos de inundaciones y promover una gestión más eficiente de los recursos en diferentes regiones del país.

La medida, que también contempla la instalación de módulos en todo el territorio para facilitar los trámites, forma parte de una estrategia integral para garantizar la seguridad hídrica de México en los próximos años.

Se espera que, con estas acciones, la nación avance en su compromiso de proteger el recurso esencial y promover el desarrollo sostenible para las generaciones futuras.

En conclusión, este decreto representa un paso importante en la política de gestión del agua en México, promoviendo la desprivatización y el uso responsable del recurso.

La recuperación de estos 4 mil millones de metros cúbicos de agua, presuntamente, contribuirá significativamente a la sustentabilidad del país, fortaleciendo a los pequeños agricultores y asegurando el acceso a uno de los recursos más valiosos para la vida y la economía nacional.