La Comunidad de Madrid destina más de 36 millones de euros en mejorar la atención y la integración social de las personas con discapacidad intelectual y trastornos graves, con nuevas instalaciones y recursos especializados en la región.
La Comunidad de Madrid ha anunciado una inversión récord de aproximadamente 36 millones de euros (unos 39 millones de dólares) para este año 2025, destinada a mejorar los servicios y recursos dirigidos a personas con discapacidad intelectual y trastornos graves de conducta.
Esta dotación económica permitirá la apertura y mantenimiento de 833 plazas públicas distribuidas en ocho centros especializados, ubicados tanto en la ciudad de Madrid como en municipios cercanos como Getafe, Leganés, Arroyomolinos, Ciempozuelos y Somosierra.
Esta iniciativa forma parte de una estrategia integral para promover la inclusión social y la calidad de vida de estas personas, garantizando atención especializada en entornos que fomenten su autonomía y participación activa en la comunidad.
La inversión refleja el compromiso de la administración regional de priorizar el bienestar social y la igualdad de oportunidades.
Uno de los hitos destacados de este plan es la reciente inauguración de la Residencia Grupo 5 Versalles, situada en el distrito de San Blas-Canillejas, en Madrid capital.
La consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, Ana Dávila, visitó las nuevas instalaciones, a las que se han destinado aproximadamente 870.000 euros (unos 940.000 dólares). Esta residencia, la octava en la red de recursos especializados, cuenta con capacidad para 42 residentes, de los cuales más de la mitad, 22, son plazas públicas.
Las instalaciones están diseñadas para ofrecer una atención personalizada, con unidades de convivencia de seis personas cada una, promoviendo así un ambiente familiar y cercano.
La residencia dispone de espacios pensados para la rehabilitación y el desarrollo de habilidades, como zonas de control visual, un gimnasio equipado y salas polivalentes donde se llevan a cabo diferentes talleres.
Entre estos talleres, destacan actividades como la gestión del dinero y pequeñas compras, que tienen como objetivo fomentar la autonomía, mejorar las habilidades sociales y facilitar la integración social de los residentes.
El equipo multidisciplinar que trabaja en la residencia incluye psicólogos, psiquiatras, terapeutas ocupacionales, trabajadores sociales, fisioterapeutas, enfermeros, educadores e integradores sociales.
Este grupo profesional se dedica a diseñar programas individualizados que abordan tanto las necesidades médicas como las sociales, buscando siempre potenciar la calidad de vida y la inclusión laboral en la medida de lo posible.
Desde su apertura en este mes, el centro ha comenzado a ofrecer servicios especializados que complementan las estructuras existentes en la comunidad.
La residencia también cuenta con espacios para actividades recreativas y terapéuticas, que facilitan el proceso de rehabilitación y el desarrollo de las capacidades individuales.
A lo largo de la historia, la Comunidad de Madrid ha sido pionera en la creación de recursos sociales dirigidos a colectivos vulnerables. En los años 80, la región implementó programas de atención a personas con discapacidad que marcaron un antes y un después en la política social autonómica.
Desde entonces, la inversión en infraestructuras y recursos ha ido en aumento, con la finalidad de ofrecer una atención más humanizada, accesible y centrada en la persona.
La apuesta por la innovación y la mejora continua ha posicionado a Madrid como una de las comunidades con mayor progreso en la atención social especializada en España.
En definitiva, la inversión de más de 36 millones de euros en 2025 refleja el compromiso de la Comunidad de Madrid con el bienestar de sus ciudadanos más vulnerables.
La apertura de nuevas residencias y la mejora de las existentes son pasos importantes para garantizar que las personas con discapacidad tengan acceso a servicios de calidad, promoviendo su autonomía, integración y participación activa en la sociedad.