La Consejería de Educación, Ciencia y Universidades de la Comunidad de Madrid ha comunicado que las becas de Formación Profesional para el curso 2025/26 alcanzarán a cerca de 12.300 estudiantes de Grado Medio y Superior, con una inversión total de 30,5 millones de euros. Este incremento del 5,2% respecto al curso anterior, cuando fueron 11.663 beneficiarios, se debe, según el propio gobierno regional, a la unificación de los trámites de concesión para la FP no obligatoria, que ahora se tramita en un único procedimiento adaptado a la normativa vigente y con un énfasis claro en apoyar a las familias con menos recursos.

El Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCM) ha publicado hoy la resolución de estas ayudas, y los listados de admitidos pueden consultarse en el portal institucional www.comunidad.madrid. En esta convocatoria se ha incorporado como novedad la posibilidad de prorrogar la ayuda obtenida para los cursos 2026/27 y siguientes, siempre que se mantengan las circunstancias que originaron la concesión y se solicite la prórroga.

Las becas cubren a estudiantes de Grado Superior y Grado Medio que estudian en centros privados autorizados por la Comunidad de Madrid, con opciones presenciales, semipresenciales y virtuales.

En cuanto a las cuantías, para el Grado Superior la ayuda anual en el primer curso oscila entre 2.500 y 3.250 euros, en función de la renta per cápita familiar; para el segundo y tercer curso (este último para dobles ciclos), la cantidad se sitúa entre 1.925 y 2.525 euros. Por su parte, los alumnos de Grado Medio pueden optar a una cuantía anual que va desde 1.659 hasta 2.765 euros, también dependiendo de la renta familiar.

Además, los beneficiarios de la Renta Mínima de Inserción (RMI) e Ingreso Mínimo Vital (IMV) reciben 3.500 euros en el primer año y 2.800 euros en segundo y tercer curso del Grado Superior; si estudian un Grado Medio, la ayuda asciende a 3.000 euros.

Resolución de las Becas de Segunda Oportunidad: el BOCM también ha publicado la resolución de las becas del Programa Segunda Oportunidad, una ayuda destinada a jóvenes que no están cursando estudios ni trabajando y que desean retomar su formación para obtener una cualificación académica.

En esta convocatoria, a la que la Administración regional ha destinado 15 millones de euros, han resultado beneficiarios 3.334 jóvenes, 750 más que el año anterior. El listado también está disponible en www.comunidad.madrid. Los aspirantes deben estar inscritos en el Sistema Nacional de Garantía Juvenil y no haber tenido una ocupación laboral ni educativa al momento de presentar la documentación para optar a la ayuda.

El importe que pueden recibir puede llegar hasta 2.800 euros, repartidos en 10 mensualidades.

Históricamente, y supuestamente como parte de una estrategia más amplia para reforzar la cualificación profesional de los jóvenes, estas ayudas se han ido consolidando dentro de un marco de políticas regionales que buscan reducir el abandono escolar y mejorar las oportunidades laborales.

A modo de contexto histórico, en la última década la inversión en becas de FP en la Comunidad de Madrid ha experimentado un crecimiento sostenido, con aumentos anuales que reflejan la prioridad de las autoridades regionales por la formación técnica frente a entornos laborales cada vez más competitivos.

Aunque estas afirmaciones se basan en tendencias observadas en los presupuestos y planes educativos de gobiernos anteriores, se encuentran matizadas por cambios en la economía, la normativa y la demanda de perfiles formativos.

Supuestamente, estas medidas también buscan adaptar la FP a la diversidad de modalidades de enseñanza, incluyendo modelos semipresenciales y virtuales, de forma que más jóvenes puedan compatibilizar estudios con otras circunstancias familiares o laborales.

En ese sentido, la resolución publicada hoy facilita la continuidad de las ayudas mediante la posibilidad de prórrogas y la ampliación de criterios para la selección de beneficiarios, lo que podría impactar de manera positiva en la permanencia y finalización de los ciclos formativos.

En resumen, la política educativa de la Comunidad de Madrid para FP se presenta como un intento decidido de ampliar el acceso, mejorar las condiciones de las becas y garantizar que la formación profesional siga siendo un puente efectivo hacia la inserción laboral, especialmente para quienes viven en entornos con mayores barreras económicas.