Un bebé de seis meses, que fue operado tras anomalías durante el embarazo, se encuentra en estado crítico luego de que un error de un enfermero en Jujuy cambiara la medicación por leche en su suero, generando preocupación en la comunidad médica y familiar.

Un dramático incidente ocurrió en el Hospital Materno Infantil Héctor Quintana, ubicado en la provincia de Jujuy, Argentina, donde un bebé de solo seis meses, que había sido internado tras ser sometido a una operación por anomalías detectadas durante el embarazo, se encuentra actualmente en estado crítico.

La causa de esta delicada situación fue un grave error cometido por un enfermero, quien en lugar de administrar la medicación correspondiente, inyectó leche en el suero del menor.

El hecho ha generado conmoción en la comunidad y ha puesto en cuestionamiento la seguridad en los hospitales públicos del país.

El incidente fue rápidamente denunciado por la madre del bebé, quien narró con angustia lo ocurrido. En diálogo con un medio local, expresó: "Cuando me di cuenta de que estaban ingresando leche, noté que ya habían pasado más de 60 mililitros. Comencé a gritar y en cuestión de segundos, enfermeros y médicos estaban atendiendo a mi hijo con urgencia". La madre, que prefirió mantener el anonimato, describió la escena como un momento de pánico y desesperación.

Desde el centro de salud explicaron que, al ingresar leche en el torrente sanguíneo del niño, podría haber ocurrido un paro cardíaco, un evento potencialmente fatal.

Los médicos advirtieron que la leche, al pasar por su cerebro, corazón, riñones y pulmones, generó una situación de extrema gravedad. La confusión, según explicaron, ocurrió por un error humano en un entorno donde se supone que deben cumplirse estrictos protocolos de seguridad.

Este tipo de errores no son habituales en centros hospitalarios con altos estándares, pero en Argentina, el sistema de salud pública ha enfrentado múltiples desafíos en materia de recursos y personal, lo que puede contribuir a situaciones como esta.

La historia del bebé de Jujuy se recuerda también por casos pasados en los que la negligencia médica ha tenido consecuencias fatales, reflejando la necesidad de reforzar controles y capacitaciones en los hospitales.

Actualmente, el menor permanece en terapia intensiva bajo cuidados de un equipo médico interdisciplinario. Su estado es reservado y todo indica que la situación es muy delicada. La madre, con lágrimas en los ojos, expresó: "Solo con la ayuda de Dios podrá salir adelante. Estamos muy preocupados y agradecemos a los médicos que están haciendo todo lo posible por él".

Por su parte, las autoridades judiciales han actuado rápidamente. El fiscal regional Guillermo Beller informó que el enfermero involucrado fue detenido de inmediato. El profesional, de 47 años con 13 años de experiencia en el hospital, ya tenía un sumario previo en su historial laboral, aunque el fiscal aclaró que esto no implica responsabilidad en el caso actual.

El acusado permanece bajo custodia, y su teléfono móvil fue incautado para realizar peritajes y determinar si existió alguna intención deliberada o si fue un error accidental.

Este incidente ha generado una fuerte repercusión en la opinión pública, que exige mayor control y responsabilidades en la atención médica. La comunidad espera que se esclarezcan todos los detalles y se tomen medidas para evitar que tragedias similares vuelvan a ocurrir en el futuro. La historia del bebé de Jujuy se suma a una larga lista de casos en los que la negligencia en la salud pública ha puesto en riesgo vidas humanas, poniendo en evidencia la necesidad de reforzar los estándares de seguridad y capacitación en los centros de salud del país.