Un niño de cinco años fue llevado de urgencia al hospital tras consumir accidentalmente una sustancia que resultó ser LSD, dejando en evidencia los riesgos de la negligencia en el cuidado infantil y la presencia de drogas en el entorno familiar.
Un niño de apenas cinco años ingresó de emergencia en el Hospital Pediátrico de Resistencia, en Argentina, tras sufrir una grave intoxicación provocada por la ingesta accidental de una sustancia que resultó ser LSD.
El incidente ocurrió en el domicilio familiar, donde el menor encontró una gomita de color y sabor dulce que, sin saberlo, contenía la potente droga alucinógena.
Según informaron medios locales, el niño estaba jugando en su casa cuando encontró la golosina y la consumió, confundiendo la sustancia con un simple dulce.
Inmediatamente, el menor comenzó a presentar síntomas severos, como pérdida de conciencia, mareos, confusión y desorientación. La hermana mayor, de 10 años, fue quien alertó rápidamente a su padre, un DJ de 45 años, quien de inmediato lo trasladó al hospital. Allí, los médicos le realizaron un lavado de estómago y le administraron tratamiento para contrarrestar los efectos de la droga. Actualmente, el niño permanece hospitalizado, pero fuera de peligro, en observación y recuperándose de la intoxicación.
Este episodio ha suscitado una profunda preocupación en la comunidad y ha motivado una intervención judicial para esclarecer cómo la sustancia terminó en manos del menor y si se produjo alguna negligencia por parte de los adultos responsables.
La presencia de drogas en el hogar, especialmente en un entorno familiar donde hay niños pequeños, plantea serias cuestiones sobre la seguridad y el control de sustancias peligrosas.
Cabe recordar que, en Argentina, la ley establece severas penas para quienes trafican o poseen drogas ilegales, pero también pone énfasis en la protección de los menores.
La situación ha generado debates sobre la necesidad de reforzar las medidas de prevención y educación respecto a la exposición a sustancias peligrosas en los hogares.
A modo de contexto, en Argentina, los precios de sustancias ilícitas como el LSD pueden variar considerablemente, pero se estima que un blot de LSD puede costar alrededor de 200 a 300 dólares argentinos, es decir, aproximadamente entre 1.800 y 2.700 euros. Estas cifras reflejan la gravedad del problema, ya que la disponibilidad de drogas en el mercado ilícito facilita que los menores puedan acceder a ellas, incluso en entornos familiares.
En los últimos días, también se reportó un episodio preocupante en la provincia de Tucumán, donde más de 90 estudiantes, entre 13 y 17 años, presentaron síntomas como náuseas, mareos y vómitos.
Aunque las autoridades aún no han determinado con certeza la causa, se sospecha que una sustancia ofrecida por un alumno pudo haber sido la responsable.
Estos incidentes evidencian la creciente problemática del consumo de sustancias entre adolescentes y la necesidad urgente de implementar campañas de prevención y control.
La presencia de drogas en espacios familiares y escolares representa un riesgo real para la salud y la seguridad de los jóvenes. Autoridades y organizaciones sociales llaman a la reflexión y a la acción conjunta para reducir estos episodios, promoviendo la educación y la vigilancia en todos los ámbitos donde los menores se desarrollan.