Con el objetivo de revertir el 0-3 obtenido en la ida, el Real Madrid se presentó con todo su arsenal para enfrentar al Arsenal en los cuartos de final de la Champions League.

Desde el principio, los merengues buscaron marcar la pauta del partido en el estadio Santiago Bernabéu, donde la afición esperaba un milagro. Sin embargo, a los 10 minutos de juego, el árbitro sorprendió a todos al señalar un penalti a favor del equipo inglés. Tras consultar el VAR, el juez decidió que había habido una falta dentro del área durante un tiro de esquina, lo que dejó a los aficionados del Madrid en un estado de nerviosismo.

Bukayo Saka, la joven estrella del Arsenal, se preparó para ejecutar la pena máxima, un momento que podría haber cambiado el rumbo del encuentro. Sin embargo, el portero belga Thibaut Courtois, conocido por su habilidad bajo los tres palos, se convirtió en el héroe del día al detener el penalti, lo que desató una ola de euforia entre los seguidores del Madrid.

El marcador se mantuvo en 0-0, y con ello, el sueño de remontar aún estaba vivo.

El episodio del penalti ha generado un debate entre los aficionados al fútbol. Algunos se cuestionan la decisión del árbitro, sugiriendo que si hubiera sido al revés y se hubiera pitado a favor del Madrid, esto habría provocado una gran controversia.

"Si esto pitaban como penal a favor del Real Madrid, sería un ESCÁNDALO. Hoy le tocó que sea en su contra. Los neutrales estamos en contra que piten este tipo de cosas", expresó un aficionado en redes sociales, reflejando el sentir de muchos.

Esta actuación de Courtois no es un hecho aislado. El guardameta ha sido fundamental en la trayectoria del Madrid en la Champions League a lo largo de los años. En la temporada 2017-2018, por ejemplo, tuvo un papel crucial ayudando al equipo a ganar su decim tercera Champions, y su capacidad para detener penales ha sido aclamada por muchos.

En el partido de hoy, su intervención fue clave para mantener con vida las ilusiones de los madridistas.

A medida que avanza el partido, el Real Madrid buscó la manera de encontrar el gol que les diera la ventaja, mientras que el Arsenal intentaba consolidar su defensa y aprovechar cualquier oportunidad de contraataque.

La tensión en el estadio creció, y cada jugada se volvió más intensa. Con cada minuto que pasaba, la afición merengue se llenaba de esperanzas, recordando que en el fútbol, la fe y el esfuerzo pueden dar giros inesperados a la historia.

Mientras tanto, el Arsenal deberá reflexionar sobre su actuación y cómo un penalti fallado puede cambiar la dinámica de un partido tan crucial. La vuelta promete ser igualmente intensa, y todos los ojos estarán puestos en cómo reaccionarán ambos equipos ante este nuevo desafío.