El ídolo chileno de la Lazio, Marcelo Salas, regresó al estadio Olímpico de Roma para presenciar un partido, pero la asistencia fue mucho menor de lo esperado debido a una protesta de la barra del club. La situación generó controversia y tristeza entre los seguidores del exdelantero.

Marcelo Salas, uno de los ídolos más queridos en la historia de la Lazio, realizó un inesperado regreso al estadio Olímpico de Roma en calidad de espectador.

El exdelantero chileno, quien conquistó el Scudetto en el año 2000 y dejó una huella imborrable en la afición, se presentó en las instalaciones para presenciar el partido contra el Lecce.

La jornada tenía un significado especial, ya que los fanáticos y el club estaban buscando rendirle un homenaje por su contribución al equipo y a la historia del fútbol italiano.

Supuestamente, la visita de Salas coincidió con la celebración de un momento importante para la Lazio, que logró una victoria por 2-0 en ese encuentro.

Sin embargo, lo que parecía ser una celebración emotiva se convirtió en una decepción para muchos seguidores del