La selección femenina de Canadá enfrentó a Suiza en un partido amistoso disputado en la ciudad de Lucerna, en Suiza, que terminó con una derrota por 1-0 para las visitantes.

Este encuentro, que tuvo lugar en el contexto de las distintas ventanas internacionales de FIFA, dejó varias lesiones y un ambiente de alta tensión en el campo.

El partido comenzó con un ritmo intenso y con una presión temprana por parte del equipo local, que quiso aprovechar su condición de local y la motivación de jugar en casa.

Sin embargo, fue Canadá quien generó varias oportunidades de peligro durante los primeros minutos, aunque sin poder concretar en la red. La jugadora más destacada para Canadá fue la joven Olivia Smith, quien había llegado a este encuentro con grandes expectativas tras su reciente fichaje por el Arsenal de Inglaterra por una cifra record en la historia del fútbol femenino en transferencias, aproximadamente 1,000,000 de libras esterlinas, lo que equivale a unos 1,200,000 euros.

Lamentablemente, ese momento de buenas noticias se vio empañado en el minuto 32, cuando Smith sufrió una caída aparatosa en una acción que parecía haber sido muy dura por parte de la defensora suiza Viola Calligaris.

La jugadora canadiense permaneció varios minutos en el suelo, siendo atendida médicamente en el césped, antes de ser trasladada en una máquina de golf a la banca y, posteriormente, al hospital.

Se reportó que Smith tenía un fuerte dolor en la pierna derecha y que la evaluación inicial indicaba una posible fractura, aunque aún no hay confirmación oficial.

Este incidente generó mucho debate en la cobertura del partido, ya que la árbitra, Maika Vanderstichel, no cobró ninguna falta, lo que provocó la ira del cuerpo técnico canadiense, especialmente del entrenador Casey Stoney, quien protestó vehementemente desde la línea de banda.

Su lesión fue un golpe duro para Canadá, que ya había perdido a varias de sus figuras clave por lesión o suspensión antes del partido, incluyendo a la arquera Lysianne Proulx y la defensora Kadeisha Buchanan.

Además, la falta de continuidad en la selección, sumada a la juventud del plantel – con una media de edad de 24 años – hace que el equipo busque consolidar su estructura en un proceso de crecimiento.

En lo que respecta al desarrollo del partido, Suiza, dirigida por la experimentada Pia Sundhage, exseleccionadora de Estados Unidos, aprovechó las circunstancias para marcar el único gol del encuentro a través de Alayah Pilgrim en el minuto 12.

La jugadora que milita en el AS Roma logró rematar en el área tras una falla en la defensa canadiense. A partir de ahí, el equipo suizo se dedicó a defender el resultado y a administrar la diferencia, resistiendo los embates de Canadá en los minutos finales, con especial intensidad en los añadidos.

Canada intentó igualar el marcador en varias ocasiones en la segunda parte, generando oportunidades claras que no lograron convertir, entre ellas una rematada en el minuto 86, cuando Nichelle Prince disparó al poste después de una buena jugada individual.

Además, jugadoras como Jordyn Huitema, Ashley Lawrence y la debutante Florianne Jourde ingresaron en la segunda mitad para buscar el empate.

Este resultado representa una pérdida importante para Canadá, que busca levantar su nivel tras una derrota 3-0 ante Estados Unidos en julio pasado, y que aspira a potenciar su rendimiento en los próximos partidos.

El equipo encabezado por Casey Stoney afrontará su siguiente compromiso ante Países bajos en Nijmegen, y cerrará el ciclo de 2025 enfrentando a Japón en la ventana de FIFA de noviembre.

Por su parte, Suiza, que en verano participó en la Eurocopa femenil y fue parte del reciente Campeonato de Europa, busca recuperar confianza tras su descenso de la Liga A en la UEFA Women’s Nations League, situación que complica sus perspectivas en la clasificación para el Mundial de 2027, que se disputará en Australia y Nueva Zelanda.

La derrota en este amistoso añade un matiz más a su enigmático escenario de clasificación, que continúa en marcha.

En definitiva, este amistoso sirvió para evidenciar las áreas en las que Canadá necesita mejorar y también dejó en evidencia los riesgos que enfrentan las selecciones en partidos donde la dureza física puede poner en peligro a las jugadoras.

La lesión de Olivia Smith, considerada una de las promesas del fútbol femenino canadiense, será una historia que marcará los próximos meses de la preparación del equipo nacional.

Mientras tanto, los aficionados esperan que la joven pueda recuperarse rápidamente y volver a las canchas en buena forma.