El Gobierno Vasco ha abierto la convocatoria para la edición 2025 del Premio Francisco Javier Gómez Elosegui, que reconoce el compromiso y la excelencia en el ámbito penitenciario, especialmente en la defensa de los derechos humanos y la reinserción social. La dotación económica del galardón es de 10.000 euros y busca destacar trayectorias ejemplares que contribuyen a humanizar el sistema penitenciario vasco.

En el País Vasco, el Gobierno Vasco ha anunciado la apertura de la convocatoria para la edición 2025 del Premio Francisco Javier Gómez Elosegui, una distinción que busca reconocer públicamente los esfuerzos de individuos y organizaciones que trabajan por mejorar el sistema penitenciario en términos de dignidad, derechos humanos y reinserción social.

Este galardón fue creado como parte del Plan Estratégico de Subvenciones 2025-2028 del Departamento de Justicia y Derechos Humanos de Euskadi, con una dotación económica de aproximadamente 10.000 euros, equivalente a unos 9.200 euros en moneda actual, considerando la inflación y la fluctuación cambiaria. La cultura de reconocimiento y valoración de quienes aportan a una justicia más humana tiene raíces profundas en la historia del País Vasco, una región con una tradición de compromiso social y respeto a los derechos fundamentales.

El premio lleva el nombre de Francisco Javier Gómez Elosegui, un psicólogo que trabajó en Instituciones Penitenciarias y cuya vida fue truncada por ETA en 1997.

Gómez Elosegui es recordado por su incansable labor en favor de la dignidad de las personas presas, la reinserción social y el respeto a los derechos humanos.

La apuesta de la convocatoria actual refleja los valores que él promovió durante su vida, destacando aquellos proyectos o trayectorias que ejemplifican la humanización de las prisiones y el apoyo a la rehabilitación.

El proceso de selección se realiza mediante una resolución anual de la Viceconsejería de Justicia, y este reconocimiento no requiere de solicitud previa por parte de los candidatos.

La idea central es promover una política penitenciaria centrada en la dignidad humana, la justicia social y la reinserción activa, reconociendo públicamente aquellas iniciativas que contribuyen a construir un sistema más justo, humano y transformador.

Históricamente, este galardón ha sido otorgado a organizaciones y personas que, desde diferentes ámbitos, han contribuido a mejorar las condiciones en las instituciones penitenciarias del País Vasco.

En ediciones pasadas, entidades como la Asociación Loiolaetxea, que apoyó procesos de reintegración social de personas reclusas desde 2020, y la Asociación ADAP, reconocida en 2021 por acompañar y empoderar a mujeres en prisión en Álava, han sido galardonadas.

Asimismo, en 2022, el premio recayó en la Asociación Bidesari por su trabajo desde 1994 en favor de personas privadas de libertad, y en 2023, la Asociación Arrats fue distinguida por sus buenas prácticas en intervención penitenciaria.

En la edición más reciente, en 2024, Ruth Alonso, jueza de vigilancia penitenciaria, fue reconocida por su arduo trabajo en programas de reinserción y resocialización, enfatizando la importancia de dignificar las condiciones de vida en las cárceles y promover la reparación social.

El compromiso del Gobierno Vasco con esta iniciativa responde a una tradición de respeto a los derechos humanos y a la necesidad de seguir promoviendo un sistema penitenciario que no solo castigue, sino que también ofrezca oportunidades de renovación y reintegración social, en línea con los principios universales recogidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos y las normativas europeas.

Este premio continúa siendo una herramienta fundamental para destacar y valorar el esfuerzo de quienes trabajan por un sistema penitenciario más humano en Euskadi, reafirmando el compromiso de la comunidad con una justicia que dignifica y transforma.