El proyecto DemoSATH en Euskadi es un avance significativo hacia la generación de energía eólica marina, destacando la capacidad industrial y tecnológica de la región.

En la costa de Armintza, un ambicioso proyecto llamado DemoSATH está liderando la transición hacia energías más limpias en Euskadi. Este aerogenerador marino flotante, desarrollado en colaboración entre la compañía vasca Saitec, la alemana RWE y la japonesa Kansai Electric Power Co., tiene una capacidad de generación de 2 MW, lo que equivale a las necesidades energéticas de aproximadamente 2,500 hogares. A medida que avanza el año 2024, las autoridades locales ven necesario impulsar el uso de energías renovables, que actualmente solo representan un 17% de la generación energética total.

Durante la reciente visita al DemoSATH, Mikel Jauregi, Consejero de Industria, Transición Energética y Sostenibilidad del Gobierno Vasco, enfatizó la relevancia del proyecto como una demostración del potencial de Euskadi en el ámbito de la energía renovable.

"Con el apoyo de tecnologías avanzadas y una sólida base industrial, podemos no solo contribuir a la sostenibilidad, sino también posicionar a nuestra región como un referente global en energías limpias", afirmo Jauregi.

El DemoSATH se ha instalado a 2 millas de la costa, en una zona conocida como BiMEP, que funciona como área de pruebas para tecnologías relacionadas con energías marinas y plataformas eólicas flotantes.

Este lugar se ha seleccionado por ser un área óptima para el aprovechamiento de recursos eólicos y oceánicos, con un fondo marino de 50 a 90 metros de profundidad y un acceso rápido desde el puerto.

El BiMEP está en gran medida financiado por el Ente Vasco de la Energía (EVE), respaldando así la innovación y experimentación en energías renovables en la región.

A nivel mundial, la instalación de DemoSATH es un adelanto notable, marcando el quinto proyecto en Europa que incorpora una turbina de más de 1 MW en el mar abierto, y es también la tercera tecnología de hormigón en alcanzar esa capacidad.

Este aerogenerador tiene una altura impresionante de 70 metros, con palas que alcanzan los 40 metros de longitud, anclado a 85 metros del lecho marino, lo que subraya la complejidad y avance técnico que implica su instalación.

Históricamente, Saitec, que fue fundada en 1988, ha representado la innovación en el sector energético y desde 2016, su spin-off Saitec Offshore Technologies ha estado trabajando para ofrecer soluciones vanguardistas en el área de la energía eólica flotante, lo que demuestra el compromiso de Euskadi con un modelo energético sostenible.

Jauregi hizo hincapié en que la transición energética requiere un cambio significativo en la manera en que se producen y consumen energías. "Para alcanzar los objetivos de cero emisiones netas para 2050, es crucial fomentar la eficiencia, aumentar la autogeneración y adoptar el almacenamiento de energía.

La energía eólica, particularmente la marina flotante, desempeñará un papel central en este proceso".

La iniciativa DemoSATH ilustra cómo las inversiones en tecnología innovadora no solo cumplen con los objetivos de sostenibilidad, sino que también pueden ofrecer soluciones efectivas a las crecientes demandas energéticas del futuro.

"Es momento de desplegar todo nuestro potencial y ser valientes en nuestra apuesta por las energías renovables", concluyó Jauregi.