La decisión de Honda de detener la producción del Acura ZDX eléctrico para 2026 supone un cambio importante en el mercado de vehículos eléctricos en Europa. Este movimiento refleja las dificultades que enfrentan los fabricantes en un sector en plena transformación y afecta a los clientes que esperaban adquirir este modelo de lujo en los próximos años.
Supuestamente, Honda ha decidido cancelar por completo la producción del Acura ZDX eléctrico, un SUV de lujo que inicialmente estaba previsto para salir al mercado en 2026.
La noticia ha causado impacto en el sector automotriz europeo, donde se esperaba que este modelo fuera uno de los principales en la categoría de vehículos eléctricos premium.
La cancelación, presuntamente, se ha comunicado a través de un memo interno obtenido por diversos medios especializados, en el que se señala que la compañía busca reorientar su estrategia en el mercado de EVs.
El Acura ZDX, que en su versión inicial se había anunciado con un precio de aproximadamente 60,000 euros, iba a ser fabricado en la planta de Spring Hill en Tennessee, en colaboración con General Motors, bajo un acuerdo que supuestamente pretendía reducir costos y aumentar la competitividad en el segmento de vehículos eléctricos de alta gama.
Sin embargo, supuestamente, la demanda en Europa no ha cumplido con las expectativas, en parte debido a que la adopción de EVs en el continente todavía enfrenta obstáculos regulatorios, la falta de infraestructura de carga adecuada y una competencia cada vez más intensa.
Se estima que en 2023, las ventas de vehículos eléctricos en Europa crecieron en torno a un 20%, pero todavía representan una fracción del mercado total automotriz.
El ZDX, que inicialmente se esperaba que impulsara la presencia de Honda en el segmento de lujo eléctrico, supuestamente, no logró captar suficiente interés, a pesar de las campañas de incentivos y descuentos que en algunos casos alcanzaron hasta 10.000 euros en beneficios y facilidades para los primeros compradores.
La decisión de cancelar el ZDX también refleja las dificultades que enfrentan los fabricantes en la transición hacia la electrificación. Supuestamente, muchas marcas están reevaluando sus líneas de producción debido a la incertidumbre sobre las políticas gubernamentales y los subsidios en diferentes países europeos.
Además, con la posible expiración del crédito fiscal federal de hasta 7.000 euros (alrededor de 6.300 euros en euros) para vehículos eléctricos en Estados Unidos, las empresas están ajustando sus estrategias para no sobreinvertir en modelos que podrían no ser rentables a largo plazo.
Honda, que en el pasado ha tenido una presencia limitada en el mercado europeo de EVs, supuestamente ha invertido en otros proyectos de movilidad eléctrica y en la expansión de su infraestructura de carga en la región.
La compañía también continúa en producción con el Honda Prologue, un SUV eléctrico desarrollado en colaboración con GM, que aún no tiene fecha definitiva de lanzamiento en Europa.
Por su parte, GM, que supuestamente también está diversificando su portafolio de EVs en Europa, sigue apostando por modelos como el Cadillac Lyriq y el Vistiq, que se venden en algunos países del continente.
La compañía ha anunciado que continuará ajustando su producción y estrategia en función de la demanda, y que planea realizar inversiones de aproximadamente 4.500 millones de euros en los próximos dos años para ampliar su capacidad de fabricación local.
En resumen, la cancelación del Acura ZDX refleja las complejidades y los retos que enfrentan los fabricantes en la transición hacia la movilidad eléctrica en Europa.
Aunque la demanda todavía no ha alcanzado los niveles esperados, los expertos creen que la innovación en baterías y la mejora en la infraestructura de carga son clave para estimular un crecimiento más sostenido en los próximos años.
La decisión de Honda también puede marcar un precedente para otras marcas que, presuntamente, están reconsiderando sus inversiones en vehículos de lujo eléctricos en un mercado cada vez más competitivo y regulado.