En el contexto laboral actual, la relación entre los empleadores y los jóvenes candidatos de la Generación Z está atravesando un cambio profundo, marcado por una creciente desconfianza y nuevas formas de interacción que desafían los métodos tradicionales de reclutamiento.

Presuntamente, estos jóvenes están rompiendo con las viejas prácticas, utilizando estrategias como el 'ghosting' —desaparecer sin aviso después de recibir una oferta de trabajo— y presentando currículos que, supuestamente, embellish sus cualificaciones con el fin de destacar en un mercado laboral cada vez más competitivo.

Según una encuesta realizada en junio de 2025 por Resume.org, más de la mitad de los responsables de contratación en Estados Unidos reportan que los candidatos de la Generación Z desaparecen después de recibir una oferta laboral, y el 66% considera que esta tendencia ha dificultado el proceso de selección.

Aunque estos datos corresponden a EE.UU., supuestamente reflejan un fenómeno global que también afecta a países europeos y latinoamericanos, donde la juventud ha mostrado una mayor desilusión con las promesas incumplidas por parte de las empresas.

Este fenómeno no surge en el vacío. La historia reciente de crisis económicas, despidos masivos y la proliferación de empleos temporales y