La cadena de comida rápida Shake Shack lanza una innovadora línea de hamburguesas inspiradas en la clásica sopa de cebolla francesa, incluyendo opciones como el Cheeseburger y el Shack Stack, además de nuevos acompañamientos como anillos de cebolla y batidos de café. Estos productos estarán disponibles en Estados Unidos a partir de septiembre, con precios que oscilan entre aproximadamente 4,8 y 13,7 euros, dependiendo del lugar.
Shake Shack, la popular cadena de comida rápida originaria de Nueva York, ha anunciado el lanzamiento de una nueva línea de productos inspirados en la emblemática sopa de cebolla francesa, una de las recetas más tradicionales y reconfortantes de la gastronomía europea.
Supuestamente, esta iniciativa forma parte de su estrategia para ofrecer opciones más innovadoras y sofisticadas a sus clientes durante la temporada otoñal.
La propuesta incluye varias variantes de hamburguesas que incorporan los sabores característicos de la sopa de cebolla, como cebollas caramelizadas, queso Gruyère y un toque de ajo asado.
La más destacada es la 'French Onion Soup Burger', que consiste en una jugosa carne de res Angus acompañada de queso Gruyère derretido, cebollas caramelizadas, cebollas crujientes y una suave mayonesa de ajo asado, todo en un pan de papa tostado.
Pero no solo hamburguesas: también han desarrollado una versión con champiñones portobello fritos rellenos de quesos fundidos, así como una torre de hamburguesas con ambos ingredientes.
Además, en respuesta a las peticiones de sus seguidores, Shake Shack ha rescatado su popular Batido de Café, que combina café de tostado oscuro con la clásica crema congelada de la cadena.
El equipo culinario de Shake Shack, presuntamente, dedicó casi dos años en perfeccionar esta línea de productos. Nick Wuest, gerente senior de innovación culinaria, comentó en una degustación exclusiva que durante el proceso experimentaron con múltiples tipos de quesos y técnicas de layering, creando al menos cinco versiones diferentes antes de decidirse por la actual.
Wuest añadió que la experiencia acumulada en diferentes tipos de restaurantes, desde comida rápida hasta alta cocina, fue clave para lograr un equilibrio en sabores y texturas.
Los precios de estos nuevos productos varían según la ubicación, pero se estima que oscilan entre 4,8 y 12,4 euros. La hamburguesa de sopa de cebolla, por ejemplo, tendrá un precio aproximado de 10 euros, mientras que los acompañamientos como las papas con parmesano costarán unos 4,8 euros y los anillos de cebolla, unos 4,2 euros.
Estos productos estarán disponibles en todas las tiendas físicas de Shake Shack en Estados Unidos a partir del 12 de septiembre, y en la aplicación móvil desde el 9 de ese mes.
La cadena planea expandir la oferta en otros países en los próximos meses, adaptándose a los gustos locales.
Al igual que en otros países, en Europa las cadenas de comida rápida han ido incorporando sabores tradicionales en sus menús para atraer a un público más diverso y sofisticado.
La sopa de cebolla francesa, en particular, es un plato que ha trascendido fronteras y que, según algunos presuntamente expertos culinarios, combina perfectamente con la textura de las hamburguesas.
En resumen, Shake Shack continúa innovando en su oferta, combinando ingredientes de alta calidad y sabores tradicionales con un toque contemporáneo.
La llegada de estas hamburguesas con sabor a sopa de cebolla francesa promete convertirse en uno de los hits de la temporada otoñal, atrayendo tanto a amantes de la comida reconfortante como a quienes buscan nuevas experiencias culinarias en la comida rápida.