El primer trimestre de 2025 mostró una disminución en el número de nuevos millonarios en planes 401(k), afectado por la inestabilidad en los mercados financieros y cambios en las políticas comerciales. La balanza de ahorros para la jubilación se vio afectada, pero la mayoría de los inversores mantuvieron su estrategia a largo plazo, mostrando resiliencia ante la volatilidad.
El comienzo de 2025 ha sido un período de gran incertidumbre para los ahorradores que invierten en planes 401(k). A pesar de las turbulencias en los mercados, los datos recientes indican que la cantidad de nuevos millonarios en estos planes ha disminuido en comparación con trimestres anteriores.
Según información de Fidelity Investments, en el primer trimestre de 2025, aproximadamente 512,000 ahorradores alcanzaron la categoría de millonarios en sus 401(k), lo que representa una caída del 4.6% respecto a los 537,000 registrados en el cuarto trimestre de 2024. Este descenso se produce en un contexto en el que, en el tercer trimestre de 2024, se alcanzó un récord de 544,000 millonarios en estos planes, evidenciando la volatilidad y los altibajos que han marcado el mercado durante los últimos meses.
El monto promedio en las cuentas 401(k) también experimentó una ligera caída, situándose en unos 117,700 euros, lo que equivale a aproximadamente 127,100 dólares estadounidenses, y representa una disminución del 3% desde finales del año pasado.
Sin embargo, en comparación con el mismo período del año anterior, los balances han aumentado en un 1%, mostrando cierta resistencia ante las turbulencias.
Este escenario refleja un año excepcionalmente impredecible, con altibajos drásticos en los mercados financieros. En 2024, los balances promedio crecieron un 11% desde el inicio del año, pero en los primeros meses de 2025, los inversores han visto cómo sus ahorros fluctuaron considerablemente.
La volatilidad se ha incrementado notablemente en comparación con años anteriores, y aunque algunos índices como el S&P 500 han logrado mantenerse relativamente estables, otros sectores, especialmente aquellos ligados a automóviles y tecnología, han sufrido pérdidas significativas.
Por ejemplo, acciones de empresas como General Motors y Stellantis han reportado caídas del 10.5% y del 25%, respectivamente, en sus valores desde el cierre de 2024. La incertidumbre sobre las políticas comerciales, las guerras tarifarias y las tensiones internacionales han contribuido a estas caídas. Tesla y Nike, que en años anteriores experimentaron altas valoraciones, también han visto retrocesos del 15% y del 18.6%, en ese orden.
A diferencia de la crisis de 2008-2009, en la que los mercados colapsaron de manera continua, en 2025 los inversores han experimentado una montaña rusa de movimientos.
Algunos días, el Dow Jones cayó más de 2,200 puntos, solo para recuperarse con una subida de casi 3,000 puntos días después. Esta alta volatilidad ha llevado a que muchos participantes en los planes de jubilación mantengan su estrategia a largo plazo, evitando vender en pánico y aprovechando las caídas para comprar con expectativa de recuperación.
Fidelity recomienda a los ahorradores seguir contribuyendo a sus planes 401(k), especialmente en un entorno de incertidumbre, ya que mantener las aportaciones permite aprovechar las contribuciones patronales y beneficiarse de las futuras recuperaciones del mercado.
De hecho, en el primer trimestre de 2025, la tasa total de contribución a estos planes alcanzó un récord del 14.3%, impulsada por un aporte promedio del 9.5% por parte de los empleados, junto con un aporte adicional del 4.8% de las empresas.
Por otra parte, la ley federal Secure 2.0, implementada en 2025, ha introducido cambios que buscan incentivar el ahorro automático. Las nuevas empresas deben inscribir automáticamente a sus empleados en planes 401(k) con aportaciones iniciales del 3%, que pueden incrementarse hasta un 10% de forma automática cada año, a menos que el empleado decida optar por no participar o modificar su contribución.
El panorama de inversión en 2025 sigue siendo desafiante, con sectores específicos como el automotriz y el tecnológico enfrentando pérdidas considerables, mientras que otros segmentos, como los fondos de fecha objetivo y las cuentas gestionadas, continúan siendo opciones preferidas por los inversores para diversificar sus riesgos.
La clave para los ahorradores sigue siendo la paciencia y la estrategia a largo plazo, especialmente en un año marcado por cambios políticos, económicos y comerciales impredecibles.
En conclusión, aunque los números muestran una disminución en la creación de nuevos millonarios en los planes 401(k), la mayoría de los participantes continúa con sus aportaciones y mantiene la esperanza de que la recuperación llegará con el tiempo.
La economía global y los mercados financieros seguirán siendo un escenario de altos y bajos en los próximos meses, pero la tendencia general apunta a que la disciplina y la planificación a largo plazo serán fundamentales para asegurar una jubilación cómoda.