Un asesor cercano al expresidente Donald Trump presuntamente vendió acciones por valor de hasta 4,7 millones de euros en Trump Media un día antes de que se anunciaran nuevos aranceles en abril, generando dudas sobre posibles conflictos de interés y uso de información privilegiada.
En un hallazgo que ha generado controversia, se ha revelado que un alto asesor cercano al expresidente Donald Trump, supuestamente, vendió acciones en la compañía Trump Media por un valor cercano a los 4,7 millones de euros justo un día antes de que el gobierno de Estados Unidos anunciara una serie de nuevos aranceles comerciales en abril.
La información proviene de informes de divulgación financiera obtenidos por medios especializados, que sugieren que la venta de estos activos pudo haber sido realizada en un momento estratégico para evitar pérdidas ante el impacto de la medida.
Supuestamente, el asesor en cuestión fue Dan Scavino, quien desde enero de 2025 ocupaba el cargo de subdirector de personal en la Casa Blanca y, antes de su ingreso, había trabajado como consultor para Trump Media, recibiendo aproximadamente 800.000 euros en honorarios, según se indica en sus declaraciones financieras. La venta de acciones, valoradas en una cantidad que oscila entre 4,2 y 4,7 millones de euros, tuvo lugar el 1 de abril, justo un día antes del anuncio oficial de Trump de imponer aranceles a importaciones provenientes de diversos países.
El 2 de abril, tras la apertura de los mercados, se dio a conocer la medida, provocando una caída significativa en los precios de las acciones relacionadas con Trump Media, que supuestamente bajaron un 11% ese día.
Sin embargo, el mercado global también sufrió una fuerte caída, perdiendo aproximadamente un 12% de su valor en los días siguientes, en un contexto de incertidumbre económica y temores de una guerra comercial prolongada.
Por su parte, expertos en ética y regulaciones financieras han expresado su preocupación ante estas transacciones, señalando que las fechas en las que se realizaron las ventas generan sospechas de posible uso de información privilegiada.
La ley conocida como STOCK, aprobada en 2012, prohíbe a funcionarios públicos realizar operaciones bursátiles basadas en información no pública, y requiere que dichas transacciones sean reportadas si superan los 1.000 euros.
Supuestamente, otros funcionarios, como Sergio Gor, director de la Oficina de Personal Presidencial, también vendieron acciones en Trump Media poco antes del anuncio, en este caso por un monto que oscilaba entre 16.000 y 50.000 euros. La respuesta oficial de la Casa Blanca ha sido que todos los miembros del equipo de Trump cumplen con las reglas éticas y de conflicto de interés, afirmando que los movimientos financieros se realizaron de acuerdo con las normativas vigentes.
A pesar de que las acciones han logrado recuperarse parcialmente desde los mínimos de abril, aún no alcanzan los niveles previos a la venta. La cotización de las acciones de Trump Media cerró el 8 de julio en aproximadamente 18,3 euros por acción, comparado con los 20,3 euros de principios de ese mes.
La situación ha reavivado debates sobre la transparencia y la ética en el manejo de activos por parte de funcionarios políticos, especialmente en contextos donde decisiones políticas pueden impactar directamente en los mercados financieros.
Supuestamente, estas revelaciones refuerzan la necesidad de una mayor supervisión y regulación en la relación entre los cargos públicos y sus inversiones personales, para evitar posibles conflictos de interés que puedan afectar la integridad del proceso democrático y la confianza pública en las instituciones.
La controversia continúa, y tanto expertos en ética como legisladores han pedido investigaciones más profundas para esclarecer si hubo manipulación de información o uso indebido de poder en estas transacciones financieras.