La famosa Casa de las Conjuraciones en Burrillville, Rhode Island, está programada para ser subastada en la noche de Halloween, una fecha que ha generado gran expectativa y especulación entre los entusiastas del género de terror y los inversionistas.

La propiedad, que ganó notoriedad internacional tras la publicación de la exitosa película "El Conjuro" en 2013, podría cambiar de manos en un momento en que su futuro es completamente incierto.

Supuestamente, la casa ha estado en el centro de atención durante los últimos años por su vínculo con la historia real de la familia Perron, quienes en los años 70 supuestamente vivieron experiencias paranormales en ese lugar.

La película, que ayudó a popularizar el sitio, convirtió a la vivienda en un destino turístico para fanáticos del cine de terror y de fenómenos paranormales.

Sin embargo, su administración ha estado plagada de controversias. En 2024, supuestamente la gestión de Jacqueline Nuñez, actual propietaria y encargada de la atracción, fue cuestionada por presuntas irregularidades financieras y problemas administrativos.

En diciembre pasado, las autoridades locales decidieron cancelar la licencia comercial del lugar, alegando papeleo incompleto y comportamientos erráticos de la propietaria en el proceso de renovación.

La policía incluso clausuró la atracción después de que una pareja de Maryland reportara que tenía una reserva para pasar la noche allí, generando dudas sobre si la casa volverá a abrirse al público o si será convertida en una propiedad privada.

La subasta, que está a cargo de Justin Manning, de JJ Manning Auctioneers, tendrá lugar en la propiedad ubicada en la 1677 Round Top Rd. a las 11 de la mañana del 31 de octubre.

Supuestamente, la subasta ya ha despertado interés no solo entre los seguidores de historias de terror y fenómenos paranormales, sino también entre desarrolladores inmobiliarios que ven en la propiedad una oportunidad para construir nuevos proyectos.

Manning afirmó que, aunque la casa ha sido listada en subasta por menos de una semana, ya ha recibido múltiples ofertas y consultas. “Todo es posible”, comentó, aunque añadió que la propiedad podría tener un valor similar al de antes, cuando funcionaba como atracción turística, o incluso más si se decide convertir en una residencia privada.

Históricamente, la casa de Burrillville fue construida en 1677 y ha sido testigo de numerosos eventos a lo largo de los siglos. En los años 70, cuando la familia Perron vivió allí, supuestamente experimentaron fenómenos extraños que aún hoy son objeto de debate y estudio en el ámbito del paranormal.

La historia fue popularizada en los medios y sirvió de inspiración para varias secuelas y spin-offs, consolidando su lugar en la cultura popular.

El interés en la subasta también se ha visto alimentado por las especulaciones de que los nuevos dueños podrían decidir abrir nuevamente la atracción, creando un espacio dedicado a investigaciones paranormales y turismo de miedo, o, por el contrario, cerrar definitivamente el lugar para convertirlo en una propiedad residencial o comercial.

La incertidumbre crece conforme se acerca la fecha de la subasta, dejando en el aire el destino de una de las casas más famosas del mundo del horror y lo sobrenatural.

Mientras tanto, la comunidad local y los seguidores de la historia continúan atentos a los movimientos en torno a esta propiedad que, presuntamente, podría volver a ser parte del universo de las historias de terror en los próximos meses, o tal vez, convertirse en un recuerdo del pasado.

La noche de Halloween será clave para definir si la casa seguirá siendo un símbolo de lo paranormal o si se convertirá en un nuevo capítulo en su historia, que seguramente seguirá dando de qué hablar en los años venideros.