Más de 240,000 SUVs de Ford y Lincoln son objeto de un llamado a revisión debido a problemas en los cinturones de seguridad. La compañía está bajo la lupa por sus prácticas de retirada de vehículos del mercado.

Ford Motor Co. ha lanzado un llamado a revisión que afecta a más de 240,000 vehículos, específicamente los modelos Ford Explorer y Lincoln Aviator de los años 2020 y 2021.

Este retiro se debe a preocupaciones sobre la seguridad de los cinturones de seguridad, ya que se ha identificado que los anclajes de los tornillos de los cinturones pueden no estar adecuadamente asegurados.

Según un informe presentado a la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras de EE. UU. (NHTSA), algunos vehículos podrían tener un tornillo del anclaje del retractor del cinturón de seguridad mal asegurado, lo que podría aumentar el riesgo de lesiones en caso de un accidente.

La magnitud de este retiro es significativa, con un total exacto de 240,510 unidades afectadas, de las cuales 216,563 corresponden al Ford Explorer y 23,947 al Lincoln Aviator.

Si los anclajes de los cinturones de seguridad no están correctamente fijados, esto podría comprometer su capacidad para mantener a los ocupantes seguros en un choque, lo que podría resultar en un aumento de las lesiones durante un accidente.

Este problema fue descubierto tras una investigación que Ford inició en diciembre de 2024, en respuesta a una queja sobre un defecto en un Ford Explorer de 2020.

Hasta el momento, la compañía no ha recibido informes de accidentes o lesiones relacionados con este problema, aunque ha identificado cuatro reclamaciones de garantía y una queja de un cliente que podrían estar vinculadas.

Como parte de la solución, Ford ha indicado que sus concesionarios inspeccionarán los anclajes de los cinturones de seguridad en todas las posiciones de los asientos.

Si se encuentran tornillos sueltos, se procederá a reemplazar los componentes afectados sin costo alguno para los propietarios. Además, se espera que las cartas de notificación a los propietarios sean enviadas el 31 de marzo de 2025.

Este escándalo no es un caso aislado para Ford. La compañía ha enfrentado críticas en el pasado debido a sus prácticas de retirada de vehículos, que algunos consideran insuficientes. De hecho, se están llevando a cabo dos investigaciones sobre cómo Ford maneja sus procesos de llamado a revisión, centrándose en la exhaustividad de las mismas y si estas realmente abordan adecuadamente los problemas identificados.

Los propietarios de vehículos afectados pueden comunicarse con el servicio de atención al cliente de Ford al 866-436-7332 para obtener más información.

El número de referencia para este retiro es 25S09. Este tipo de incidentes resalta la importancia de la seguridad en la industria automotriz y la necesidad de que los fabricantes actúen rápidamente para resolver cualquier fallo que pueda poner en riesgo la vida de los consumidores.

La seguridad vehicular ha sido un tema de creciente preocupación, especialmente a medida que los vehículos se vuelven más complejos y las tecnologías avanzan.

La historia de los retiros de vehículos muestra que, si bien los fabricantes tienen la responsabilidad de asegurar la seguridad de sus productos, los consumidores también deben estar atentos a las notificaciones y llamados a revisión que puedan afectar su seguridad y la de sus seres queridos.