La cadena farmacéutica Walgreens reduce beneficios laborales para sus empleados tras ser adquirida por una firma de capital privado por 9.2 millones de euros, generando controversia y preocupación entre los trabajadores.

La conocida cadena de farmacias Walgreens anunció recientemente la eliminación de seis días festivos pagados para la mayoría de sus empleados temporales y de jornada completa, incluyendo fechas clave como Acción de Gracias, Navidad y Año Nuevo.

La medida, que se implementó tras la adquisición por parte de una firma de capital privado, supuestamente responde a la necesidad de reducir costos en un contexto de dificultades financieras persistentes.

Este cambio ha generado un gran revuelo entre los empleados, quienes argumentan que afecta significativamente sus derechos y beneficios.

Según informaron fuentes cercanas a la compañía, la adquisición por parte de Sycamore Partners, una firma de inversión con sede en Nueva York, se cerró por un monto presuntamente cercano a los 9.2 millones de euros. Con esta compra, Walgreens, que en los últimos años ha enfrentado una caída en sus beneficios y una disminución en la rentabilidad, ha tomado medidas drásticas para reducir gastos operativos.

Entre ellas, la supresión de los días festivos pagados para empleados que trabajan en las tiendas, quienes ahora deberán laborar en días como Acción de Gracias, Navidad y otras fechas señaladas para recibir su salario habitual.

Históricamente, Walgreens siempre había ofrecido a sus empleados la posibilidad de disfrutar de estos días libres con pago completo, siempre y cuando cumplieran ciertos requisitos, como haber trabajado en la empresa por al menos seis meses.

Sin embargo, tras el cambio en la gestión, esta política se ha modificado. Ahora, los empleados deben trabajar en esas fechas para recibir su salario correspondiente, además de ser considerados para una paga adicional por días festivos, que también ha sido reducida.

Se presuntamente, esta medida responde a una estrategia de reducción de costos que la firma de inversión busca implementar para mejorar los resultados financieros de Walgreens, que en 2024 anunció planes para cerrar aproximadamente 1,200 tiendas en Estados Unidos debido a la baja en las ventas y las compensaciones por medicamentos, que siguen siendo una de las principales fuentes de ingreso de la cadena.

La compañía también ha reducido su plantilla en áreas administrativas, despidiendo a unos 80 empleados en octubre, en su mayoría del equipo de comunicación.

La decisión ha generado un fuerte rechazo entre los trabajadores, quienes aseguran que la eliminación de estos beneficios afecta su calidad de vida y su estabilidad económica.

La situación se enmarca en un contexto más amplio de cambios en el sector retail y farmacéutico, donde las empresas buscan adaptarse a un entorno cada vez más competitivo y con márgenes de ganancia reducidos.

Es importante recordar que Walgreens, fundada en 1901, ha sido durante décadas una de las cadenas más reconocidas en Estados Unidos, con una presencia significativa en el país y una historia que refleja los cambios económicos y sociales del siglo XX y XXI.

La reciente adquisición por parte de un fondo de inversión internacional presuntamente refleja una tendencia global de privatización y reestructuración de empresas tradicionales, en la que los beneficios laborales muchas veces se ven afectados en favor de la rentabilidad.

Hasta el momento, ni Walgreens ni Sycamore Partners han emitido declaraciones oficiales respecto a estos cambios. Se espera que la situación continúe generando debate y atención tanto en los medios como entre los empleados afectados, quienes buscan mantener sus derechos en un escenario de profunda transformación empresarial.