Elon Musk ha afirmado que no tiene interés en adquirir TikTok, la popular aplicación de videos cortos, en un contexto de crecientes preocupaciones de seguridad nacional en Estados Unidos.
El magnate de los negocios, Elon Musk, ha declarado recientemente que no tiene intención de adquirir TikTok, la famosa plataforma de videos cortos que ha sido objeto de controversia en Estados Unidos debido a preocupaciones sobre la seguridad nacional relacionadas con su propietario chino, ByteDance.
Estas declaraciones fueron realizadas durante un evento virtual organizado por el grupo WELT, parte de la empresa de medios Axel Springer SE, donde Musk participó a través de videoconferencia.
Musk, quien es conocido por su participación activa en el mundo de la tecnología y los negocios, afirmó: "No he hecho ninguna oferta por TikTok". Esta afirmación se produce en un contexto en el que el expresidente Donald Trump había insinuado anteriormente que Musk podría estar interesado en adquirir la aplicación en caso de que así lo decidiera.
"No tengo planes de qué haría si tuviera TikTok", añadió Musk, quien también mencionó que no utiliza la aplicación y no está familiarizado con su formato.
El empresario, que ha estado en el centro de atención por su adquisición de Twitter, ahora conocida como X, destacó que su enfoque habitual es construir empresas desde cero, lo que hace que su compra de Twitter sea una excepción a su regla.
"Generalmente no adquiero empresas, es bastante raro", indicó.
La situación de TikTok ha estado marcada por la incertidumbre, ya que la administración estadounidense ha amenazado con prohibir la aplicación debido a preocupaciones de que el gobierno chino podría acceder a los datos de los usuarios estadounidenses.
TikTok ha negado en repetidas ocasiones que comparta información sobre sus usuarios con el gobierno chino, pero eso no ha detenido las especulaciones.
En el pasado, Trump firmó una orden ejecutiva que buscaba retrasar la prohibición de TikTok, que estaba programada para entrar en efecto el 19 de enero.
Esto se debió a la presión ejercida por los legisladores estadounidenses, quienes expresaron su preocupación por los posibles riesgos de seguridad nacional que plantea la aplicación.
El entonces presidente había dado un plazo a ByteDance para que vendiera los activos de TikTok en Estados Unidos o enfrentara una prohibición.
A pesar de las tensiones políticas, TikTok sigue siendo una de las aplicaciones más populares en EE. UU., con aproximadamente 170 millones de usuarios en el país. Recientemente, TikTok ha intentado eludir las restricciones al permitir que los usuarios de Android en EE. UU. descarguen e instalen la aplicación a través de paquetes disponibles en su sitio web.
La postura de Trump hacia TikTok ha cambiado con el tiempo, ya que en su primer mandato buscó prohibir la aplicación, pero ahora parece tener una actitud más favorable, reconociendo el impacto positivo que la plataforma ha tenido en su conexión con los votantes más jóvenes para las elecciones de 2024.
Esto marca un giro significativo en el discurso político respecto a la aplicación, que ha estado en el centro de la controversia durante varios años.
La situación de TikTok continúa siendo un tema de debate, con implicaciones tanto para la seguridad nacional como para la libertad de expresión en el ámbito digital.