Las vacaciones fiscales en diversos estados ofrecen una oportunidad para que padres y estudiantes ahorren en compras escolares, en medio de un contexto de incertidumbre económica y aumentos de tarifas. Descubre cómo beneficiarte y qué artículos están exentos de impuestos durante estas fechas.

Las vacaciones fiscales para compras relacionadas con la vuelta al cole en varios estados de Estados Unidos se presentan como una excelente oportunidad para que las familias puedan reducir sus gastos en un momento en el que la economía global y local generan cierta incertidumbre.

Estas fechas, donde ciertos productos están exentos del impuesto sobre las ventas, permiten a los consumidores ahorrar hasta aproximadamente 150 euros en algunas compras.

La tendencia de aprovechar estas vacaciones fiscales no es nueva, pero en los últimos años ha cobrado mayor relevancia debido a las preocupaciones sobre tarifas aduaneras y el aumento de la inflación.

Supuestamente, en julio y agosto, 17 estados de EE. UU. ofrecen periodos en los que determinados artículos escolares y de uso cotidiano están libres de impuestos. Estos días, conocidos como 'vacaciones fiscales', abarcan desde un fin de semana hasta casi un mes completo, dependiendo del estado. Por ejemplo, Mississippi fue uno de los primeros en ofrecer esta exención, que se llevó a cabo del 11 al 13 de julio, permitiendo a los compradores adquirir ropa, útiles y dispositivos electrónicos sin pagar el impuesto correspondiente.

En algunos estados, esta iniciativa no solo cubre artículos escolares, sino también ropa y zapatos con un valor límite de aproximadamente 90 euros por artículo, así como ordenadores portátiles y accesorios electrónicos con un límite de unos 1,350 euros.

En Florida, por ejemplo, que extiende su periodo de exención durante todo agosto, los consumidores pueden comprar útiles escolares por menos de 45 euros y prendas con un valor de hasta 90 euros sin pagar impuestos.

Del mismo modo, en Ohio, que también tiene un periodo de exención del 1 al 14 de agosto, cualquier compra de bienes tangibles por menos de 450 euros está exenta de impuestos, incluyendo productos no exclusivamente relacionados con la educación.

Estos periodos de exención fiscal, además de ofrecer ahorro, buscan incentivar el comercio local en un contexto donde las tiendas físicas y online compiten por captar la atención del consumidor.

La historia de estas vacaciones fiscales se remonta a varias décadas atrás, cuando los estados comenzaron a implementar estas medidas como estrategias para estimular la economía y aliviar la carga financiera de las familias, especialmente en tiempos de recesión.

Es importante destacar que, supuestamente, en algunos estados la lista de artículos exentos puede variar y que, en ciertos casos, las compras online también califican para la exención siempre que se realicen dentro del período establecido y cumplan con los límites de valor.

Además, en algunas jurisdicciones, las tasas locales adicionales pueden seguir aplicándose, por lo que se recomienda consultar las páginas oficiales de cada estado para obtener información actualizada.

En conclusión, aprovechar estas vacaciones fiscales puede representar un ahorro significativo para quienes están preparando a sus hijos para el nuevo ciclo escolar.

La clave está en planificar con anticipación, conocer las fechas específicas y los límites de compra en cada estado, y así maximizar los beneficios económicos en medio de un escenario económico desafiante y cambiante.