En 2025, las agencias de puntuación crediticia en Europa integrarán los préstamos 'compra ahora y paga después' en sus informes, lo que podría cambiar la forma en que los consumidores gestionan su crédito y su historial financiero. Esta actualización refleja la creciente importancia de estos productos en el mercado financiero y su posible impacto en la calificación crediticia de millones de usuarios.
En un movimiento que ha generado expectación en el sector financiero europeo, las principales agencias de puntuación crediticia, como Experian, Equifax y TransUnion, presuntamente comenzarán a incluir los préstamos del tipo 'compra ahora y paga después' en sus informes y algoritmos a partir de principios de 2025.
Esta decisión, que refleja la tendencia global de integración de nuevas formas de financiamiento en los sistemas de evaluación crediticia, podría tener un impacto significativo en la forma en que los consumidores son valorados por las instituciones de crédito.
Los préstamos 'buy now, pay later' (BNPL), que permiten a los consumidores adquirir productos y pagarlos en cuotas sin intereses o con intereses mínimos, han ganado popularidad en los últimos años.
Servicios como Klarna, Afterpay, Affirm y PayPal Pay Later ofrecen opciones de pago flexibles en compras en línea, y su uso se ha extendido rápidamente en Europa, especialmente en países con mercados de consumo dinámicos como Alemania, Francia y España.
Hasta ahora, estos préstamos no afectaban directamente la puntuación crediticia, ya que su aprobación no requería una revisión exhaustiva del historial crediticio y no se reportaban a las agencias de crédito.
Supuestamente, esta situación cambiará en 2025, cuando FICO, uno de los modelos de puntuación crediticia más utilizados en Estados Unidos y que ha comenzado a expandirse en Europa, anuncie la incorporación definitiva de los datos de BNPL en sus cálculos.
Aunque la fecha exacta de implementación aún no ha sido confirmada, se espera que en esa fecha las nuevas métricas sean adoptadas de manera generalizada, lo que podría tener efectos tanto positivos como negativos en los perfiles crediticios.
Este cambio supondría que el uso responsable de los préstamos BNPL podría mejorar la puntuación crediticia, ya que reflejaría una buena gestión del crédito en pagos a plazos, incluso en productos que anteriormente no se consideraban tradicionales.
Sin embargo, también existe la posibilidad de que su uso excesivo o irresponsable pueda perjudicar la calificación, especialmente si se acumulan varias de estas deudas simultáneamente.
Históricamente, la evaluación del crédito en Europa se ha centrado en el historial de pagos, la cantidad de deuda y la duración del crédito. La incorporación de los préstamos 'paga después' supone un cambio en esta lógica, ya que estos productos, en algunos casos, han sido utilizados para gastos esenciales como alimentación, salud o servicios básicos, sumando una carga adicional en la economía familiar.
Según expertos presuntamente involucrados en el proceso, la integración de estos datos podría beneficiar a quienes gestionan sus finanzas de manera responsable, permitiéndoles acceder a mejores condiciones de crédito y tasas de interés más bajas.
No obstante, advierten que también puede penalizar a quienes utilizan estos productos de forma desordenada o en situaciones de dificultad económica.
En conclusión, el próximo año será crucial para la evaluación del impacto de los préstamos 'compra ahora y paga después' en la puntuación crediticia en Europa.
La regulación y el control de estos productos, junto con la educación financiera, serán factores determinantes para que los consumidores puedan aprovechar sus ventajas sin poner en riesgo su historial financiero a largo plazo.