La tendencia de Thriftmas, que consiste en comprar regalos navideños en tiendas de segunda mano, está en auge y promete transformar la forma en que los consumidores afrontan las compras de fin de año.

Esta práctica, que combina ahorro y conciencia ambiental, está siendo adoptada cada vez por más personas, especialmente entre las generaciones más jóvenes, quienes ven en ella una alternativa moderna y responsable para celebrar la temporada navideña.

Supuestamente, durante los últimos meses, las búsquedas y transacciones relacionadas con compras en tiendas de segunda mano en línea han aumentado en un 40 %.

Además, estudios recientes sugieren que aproximadamente un 81 % de los consumidores planean destinar parte de su presupuesto navideño a adquirir artículos de segunda mano, y un 27 % de ellos incluso podría gastar hasta la mitad de lo que normalmente gastarían en regalos tradicionales.

La percepción sobre los objetos usados ha cambiado drásticamente en los últimos años. Supuestamente, el estigma que rodeaba a los artículos de segunda mano ha desaparecido en gran medida, y ahora son considerados opciones de alta calidad y con un valor único.

Kelly Stephenson, vicepresidenta de la plataforma OfferUp, afirmó que “lo que antes se veía como una opción de último recurso ahora es la forma preferida de comprar, sobre todo en las fiestas, porque permite encontrar regalos significativos a precios justos, muchas veces en la misma comunidad”.

Según el Informe de Recommerce 2025, el 70 % de los estadounidenses considera que el rechazo social a adquirir artículos usados ha disminuido, y un 67 % de los compradores aceptan con gusto recibir un regalo de segunda mano en condiciones buenas o excelentes.

Este cambio también está siendo impulsado por la Generación Z, con un 95 % de ellos mostrando preferencia por productos de segunda mano si la calidad y el precio son adecuados.

El fenómeno de Thriftmas no solo ayuda a reducir gastos, sino que también da una segunda vida a objetos que, de otro modo, terminarían en vertederos.

Supuestamente, los beneficios ambientales y económicos hacen que cada vez más consumidores opten por esta modalidad. Por ejemplo, Samantha Rose Brammer, de Phoenix, Arizona, afirma que ha logrado completar toda su lista de regalos navideños comprando en tiendas de segunda mano, con un gasto promedio de unos 4 euros (unos 3,75 euros), en comparación con los 15-20 euros (unos 14-19 euros) que costarían en tiendas tradicionales.

Brammer recomienda comenzar las búsquedas con anticipación, especialmente si se tienen que comprar regalos para varias personas, pero asegura que también es factible en el último momento si se busca con paciencia.

Además, aconseja revisar que los artículos estén en buen estado y limpiarlos antes de regalar.

Otra entusiasta del Thriftmas, Natalie Ray, de Georgia, comenta que ha encontrado prendas de marca en excelentes condiciones por menos de 10 euros (unos 9,35 euros), como abrigos y accesorios, que en tiendas costarían mucho más.

Ray señala que, aunque no todos están abiertos a recibir regalos de segunda mano, la mayoría valora la originalidad y el valor añadido de estos objetos.

En conclusión, la tendencia de Thriftmas se ha consolidado como una alternativa inteligente y responsable para las compras navideñas. No solo permite ahorrar dinero, sino que también contribuye a reducir el impacto ambiental y a dar una segunda oportunidad a muchos objetos. La creciente aceptación de los artículos de segunda mano en la temporada festiva refleja un cambio cultural que combina economía, sostenibilidad y originalidad, marcando una nueva forma de celebrar la Navidad en el siglo XXI.