El club San Lorenzo atraviesa una serie de dificultades económicas y políticas después de que los jugadores protestaran por la falta de pago de sus salarios, lo que evidenció tensiones con la Asociación del Fútbol Argentino (AFA). Las disputas se suman a una serie de embargos legales que afectan la operatividad del club, generando incertidumbre sobre el futuro cercano del equipo en el fútbol profesional argentino.

La situación en San Lorenzo de Almagro se ha complicado en los últimos días tras un conflicto público que revela las dificultades económicas y administrativas por las que atraviesa uno de los clubes históricos del fútbol argentino.

Tras la renuncia temporal del presidente Marcelo Moretti por motivos legales, quedó en manos de Julio Lopardo, quien asumió la responsabilidad de liderar la institución en un momento de crisis.

La tensión se desató después de que los jugadores del plantel profesional protestaran el pasado jueves debido a la falta de pago de sus salarios, lo que desató una serie de enfrentamientos y acusaciones entre dirigentes y la Asociación del Fútbol Argentino (AFA).

El conflicto comenzó cuando Lopardo explicó que los fondos embargados por autoridades judiciales afectaban la liquidación de salarios y que, por un