A medida que se acerca la última etapa del Rugby Championship, Los Pumas enfrentan la necesidad de sumar puntos cruciales para mantenerse en la lucha por los primeros puestos y avanzar en el ranking mundial de rugby, en medio de una competencia muy pareja entre las cuatro selecciones principales.
El Rugby Championship (RCH) se acerca a su fase final, y los resultados que puedan obtener las selecciones en disputa serán decisivos para definir las posiciones finales y los beneficios en el ranking mundial de rugby.
Aun cuando Los Pumas actualmente ocupan la última posición, con 9 puntos, todavía mantienen la esperanza de escalar en la clasificación general.
El torneo, que enfrenta a las cuatro principales naciones del hemisferio sur —Australia, Nueva Zelanda, Sudáfrica y Argentina—, se ha caracterizado por su alta paridad.
Hasta el momento, cada equipo ha ganado y perdido en dos ocasiones, y la diferencia en puntos solo se define por pequeños detalles: puntos bonus por tries, diferencia en los marcadores o el resultado de ciertos enfrentamientos.
Australia lidera la clasificación con 11 puntos, gracias a sus victorias y puntos bonus, mientras que Nueva Zelanda y Sudáfrica suman 10 puntos cada uno.
Los Pumas, con 9, se encuentran en el fondo, pero con posibilidades de ascenso, especialmente si logran vencer en los próximos duelos y obtener puntos bonus.
La clave será que tanto Australia como Nueva Zelanda también acumulen derrotas o empates en sus enfrentamientos, ya que en rugby cada punto adicional puede significar una diferencia significativa en la clasificación.
Por ejemplo, si Los Pumas logran vencer a Sudáfrica en su próximo enfrentamiento y además obtienen puntos bonus, podrían subir en la tabla y acortar distancias con los líderes.
Sin embargo, si Australia o Nueva Zelanda suman victorias con bonus en sus partidos, la diferencia en puntos en la clasificación podría mantener a Argentina en una posición desfavorable.
Uno de los aspectos importantes en la lucha por el posicionamiento internacional tiene que ver con el ranking de la World Rugby, que determina no solo posiciones sino también cabezas de serie para la Copa del Mundo 2027.
En ese ranking, cada resultado suma o resta puntos en función del desempeño, la calidad del rival y otros factores.
La última victoria de Los Pumas sobre Australia en este torneo les permitió escalar algunos puestos en la clasificación mundial, desplazando a los Wallabies del sexto puesto.
Sin embargo, una derrota ante Sudáfrica o Nueva Zelanda podría devolverlos a la posición inferior, complicando sus aspiraciones de estar dentro de los mejores 6 del mundo.
De cara a los próximos compromisos, Los Pumas deberán sumar en cada partido para mantenerse en la pelea, y además, aprovechar los encuentros internacionales en noviembre, donde se medirán con selecciones europeas como Gales, Escocia e Inglaterra.
La ventana europea será esencial para acumular puntos que ayuden a mejorar su posición en el ranking y a preparar mejor su participación en futuras competencias.
El calendario oficial del rugby internacional para 2024-2025 contempla que, tras el Rugby Championship, Argentina no participará en el torneo en 2026, ya que Nueva Zelanda ejerció su opción de externo y venderá su calendario, dejando un período de pausa.
Sin embargo, en la previa al Mundial, Los Pumas tienen asegurados al menos 10 partidos, incluyendo enfrentamientos contra selecciones europeas y de Oceanía, algunos de ellos fuera de Argentina.
Existe la posibilidad de que en noviembre se cree una nueva competencia llamada Nations Cup, que ofrecería rivales europeos adicionales y fortalecería el calendario internacional del equipo argentino.
Si esa iniciativa no prospera, Los Pumas participarán en una versión reducida del Rugby Championship en 2027, con apenas tres partidos, en línea con lo que acostumbran en los años previos a grandes torneos mundiales.
El objetivo de Los Pumas es claro: seguir sumando puntos y mejorando su posición tanto en el torneo como en el ranking mundial, para presentarse con mejores opciones en el próximo Mundial y en futuras competiciones internacionales.
La pelea es pareja, y cada punto puede marcar la diferencia entre estar en la élite o quedarse en el fondo de la tabla.