El equipo de River Plate, bajo la dirección de Marcelo Gallardo, empieza a recuperar el nivel mostrado en años anteriores, con resultados positivos y mejoras en el rendimiento colectivo. La reciente victoria contra Vélez, en condiciones adversas, marca un avance importante en su proceso de formación y consolidación.

El fútbol argentino vuelve a respirar aire fresco en Núñez, donde River Plate empieza a demostrar signos de recuperación y crecimiento tras meses de altibajos en su rendimiento.

La reciente goleada 4-1 a Vélez Sarsfield, en un partido que se jugó bajo una lluvia intensa y en un contexto de mejora, confirmó que el equipo dirigido por Marcelo Gallardo está en un proceso de transición hacia ese nivel de juego que tanto caracteriza a los mejores años de su primer ciclo.

Con resultados que alimentan la confianza del plantel y de la hinchada, River Plate muestra una mayor cohesión y solidez en su estilo de juego, en línea con la filosofía que Gallardo ha defendido desde que asumió su segunda etapa como entrenador.

En su primera etapa, entre 2014 y 2019, logró un éxito rotundo, conquistando la Copa Libertadores en 2015, la Recopa Sudamericana y múltiples campeonatos locales.

La presión por mantener ese nivel ha sido constante, pero ahora el equipo parece estar empezando a reencontrarse con aquella identidad futbolística.

Uno de los aspectos destacados en esta fase de consolidación es la renovación en la plantilla, que combina experiencia y juventud. Jugadores históricos como Franco Armani, Enzo Pérez, y el capitán Paulo Díaz, siguen siendo piezas clave en la estructura, mientras que las nuevas incorporaciónes, como el colombiano Kevin Castaño, están aportando frescura, volumen de juego y dinamismo.

Castaño, que llegó en el mercado de pases reciente, ya se perfila como ese mediocampista de transición que River buscaba para potenciar su midfield.

Su presencia en cancha, sumada a la recuperación de jugadores como Gonzalo Martínez y la integración de otros juveniles como Julián Álvarez y Exequiel Palacios en su momento, permite al equipo tener un recorrido más ofensivo y arriesgado, siguiendo la idea de atacar constantemente y tomar protagonismo en cada partido.

Además, la presión alta y la recuperación en campo rival se han convertido en aspectos esenciales para Gallardo, quien busca que sus jugadores sean intensos desde el inicio.

En el último encuentro, se vio a un River arrollador en el primer tiempo, pero todavía necesita mantener ese nivel durante todo el partido para consolidar su idea de juego.

Otro de los elementos clave en esta etapa de crecimiento es la táctica del “entrada y salida”, que permite a los delanteros salir del área para facilitar la llegada de los volantes y laterales.

Sebastián Driussi, que no es un nueve clásico, se adapta bien a esa función, y su rendimiento ha sido resaltado por la afición. Y hablando de refuerzos, su inversión en el delantero por aproximadamente 11 millones de dólares, ahora en euros, ronda los 9,5 millones, y empieza a dar frutos con su capacidad goleadora.

La experiencia del plantel ha sido fundamental en los momentos difíciles, pero la directiva y el cuerpo técnico también apuestan por darle mayor protagonismo a los jóvenes.

La política de recambio y desarrollo de talentos continúa siendo una estrategia central para mantener la competitividad a largo plazo.

Históricamente, River Plate ha vivido ciclos exitosos que marcaron hitos en el fútbol sudamericano. Desde su primer campeonato internacional en 1986, la conquista de la Copa Libertadores en 2015 y su triunfo en Madrid en 2018 son ejemplos de temporadas donde el club supo levantarse en momentos clave.

Sin embargo, también enfrentó periodos de crisis y replanteo, en los cuales la paciencia y el trabajo sostenido fueron fundamentales.

Ahora, con Marcelo Gallardo en el banco y una base sólida de jugadores, River intenta recuperar aquel nivel de excelencia que lo consagró como uno de los mejores en Sudamérica.

El camino no está exento de desafíos, pero las señales apuntan a que el equipo está en la senda correcta para reencontrarse con sus mejores versiones y volver a ser protagonista en el panorama continental y local.