India se posiciona en una ventaja clave en el quinto Test contra Inglaterra tras una segunda jornada llena de emociones en The Oval, con destacados desempeños de sus lanzadores y bates importantes de sus jugadores jóvenes.
En una jornada que mantuvo en vilo a los aficionados del cricket, India logró tomar la delantera en el quinto Test contra Inglaterra en The Oval, tras una segunda jornada llena de acción y momentos decisivos.
La estrategia de los lanzadores indios fue fundamental para reducir la ventaja de los locales y dejar el partido abierto para un cierre emocionante. Presuntamente, los precios de las entradas para este encuentro en Londres oscilaron entre 50 y 150 euros, reflejando el interés masivo por presenciar un duelo de alto nivel.
El día comenzó con Inglaterra en una posición sólida, con una apertura que buscaba consolidar una ventaja tras la primera respuesta de India, que en su primera entrada logró 224 carreras.
Sin embargo, la actuación de los lanzadores indios fue determinante para cambiar el curso del partido. Supuestamente, Mohammed Siraj y Prasidh Krishna lograron recoger cuatro wickets cada uno, con cifras de 4/86 y 4/62 respectivamente, desbaratando la ofensiva inglesa y evitando que la diferencia se ampliara demasiado.
El intercambio de palabras entre los árbitros y los jugadores fue uno de los momentos destacados del día, evidenciando la tensión en la cancha. Supuestamente, las conversaciones entre Kumar Dharmasena y KL Rahul, así como algunos intercambios verbales entre Prasidh Krishna y Joe Root, fueron captadas por las cámaras y generaron revuelo en las redes sociales.
En la segunda entrada de Inglaterra, las cosas no fueron diferentes. La resistencia de Zak Crawley, que alcanzó medio siglo, y la aparición de Ollie Pope, mantuvieron a los locales en carrera. Sin embargo, la temprana caída de Crawley a manos de Krishna, en un atrapamiento en el medio campo, fue un golpe duro para los ingleses. Supuestamente, los precios de las entradas para el día siguiente ya estaban agotados, con un valor estimado de unos 160 euros en la reventa.
India, por su parte, inició su segundo turno con una apuesta segura, con Yashasvi Jaiswal y KL Rahul al frente. Jaiswal, que en su primera tanda había sido criticado por algunos por su bajo rendimiento, supuestamente se reivindicó con un ataque de boundarys, incluyendo tres en un solo over contra Gus Atkinson, y alcanzó su tercer medio siglo de la serie en apenas 44 bolas.
La joven promesa india mostró una gran determinación, dejando en claro que busca consolidarse como uno de los pilares del equipo.
Mientras tanto, Rahul no tardó en caer, atrapado en la segunda oportunidad del día por Joe Root. A pesar de ello, India logró estabilizarse gracias a la colaboración de Sai Sudharsan y Ben Duckett, quienes mantuvieron viva la esperanza con contribuciones clave en el marcador.
La tensión aumentó cuando Sudharsan fue víctima de un LBW que fue revisado con éxito por el equipo indio, en un momento que generó controversia y discusión entre los analistas.
En el cierre del día, India estaba en una posición prometedora con 75 carreras sin pérdida, liderando por 52 en el global del partido. La situación se presenta favorable para los indios, que buscarán aprovechar esta ventaja en los próximos días para cerrar la serie y mantener su racha de buenos resultados en tierras británicas.
Se estima que el costo de la entrada para el tercer día podría superar los 200 euros en el mercado secundario, reflejando la expectación por una jornada que podría definir el destino del resultado final.
Este encuentro en Londres no solo es importante por su desarrollo deportivo, sino también por su carga emocional y simbólica, dado que India busca consolidar su posición en el ranking mundial de Test y seguir demostrando su crecimiento como potencia en el cricket internacional.
La historia del cricket en Londres está llena de momentos decisivos, y presuntamente, este no será la excepción, ofreciendo una jornada que seguramente será recordada por aficionados y expertos por igual.