El astro argentino Lionel Messi concluyó su tour por la India con diversas actividades en Delhi, Mumbai y Calcuta, enfrentándose a incidentes y logrando interacción con miles de seguidores en una gira marcada por la emoción, polémicas y costosos encuentros privados.
Lionel Messi cerró este lunes su extensa gira por la India, en la que participó en diversos eventos y actividades en varias de las principales ciudades del país asiático.
La visita del astro argentino, considerada parte del tour de celebridades y deportistas de mayor alcance internacional, generó gran expectación y debate en medios y redes sociales, evidenciando el impacto que tiene aún en la cultura deportiva mundial.
El pasado fin de semana, Messi protagonizó un encuentro en Mumbai con figuras destacadas del deporte y la cultura popular india, incluyendo a ídolos del cricket como Sachin Tendulkar y estrellas de cine como Kareena Kapoor.
Durante ese evento, el jugador interactuó con fans, compartió momentos de autógrafos y también participó en actividades promocionales con marcas reconocidas, en especial Adidas, su principal patrocinador.
Uno de los episodios más polémicos ocurrió en Calcuta, donde el estadio Salt Lake se convirtió en escenario de una situación caótica. La organización del evento fue duramente criticada debido a fallos en la logística y problemas de seguridad, que terminaron con la evacuación temprana de Messi tras solo 22 minutos en el campo.
Lanzamientos de proyectiles y protestas de los asistentes generaron un ambiente de tensión, además de revelar fallas en la gestión del evento. La policía tomó medidas y detuvo al promotor responsable, enviándolo a 14 días de custodia, mientras las autoridades locales promueven la creación de un comité para investigar y mejorar la organización en futuras ocasiones.
En Chennai, en cambio, Messi pudo mantener un perfil más relajado, asistiendo a un evento organizado por Adidas en el histórico sitio de Purana Qila.
Allí, el argentino compartió con deportistas indios, entre ellos el cricketer Rohit Sharma, la boxeadora Nikhat Zareen y el atleta paralímpico Sumit Antil.
Además, Messi fue mentor para unos 25 jóvenes futbolistas en la academia Minerva, brindando inspiradoras charlas y enseñanzas.
El cierre de la gira se oficializó en Delhi, en el estadio Arun Jaitley, que usualmente utiliza para partidos de cricket, el deporte nacional en India.
A pesar de la demora en su llegada debido a un retraso por la densa niebla en Mumbai, Messi pudo saludar a los miles de seguidores que colmaron el recinto.
En esta ocasión, lució su calidad de ídolo y capitán campeón mundial, intercambió camisetas con jugadoras pioneras del fútbol femenino y participó en un partido de celebridades.
Los asistentes pagaron entradas de diferentes precios, con un paquete exclusivo que incluía un encuentro personal con Messi, una fotografía y la firma de una camiseta oficial de la selección argentina.
Estos paquetes tenían un valor aproximado de 10.000 euros, y algunos encuentros privados con Messi, organizados para empresas y VIP, llegaron a alcanzar cifras cercanas a 100.000 euros, dependiendo de la exclusividad y el nivel de personalización.
Algunos expertos comparan esta gira con las tradicionales visitas de figuras internacionales a países en desarrollo, donde el impacto cultural y económico genera tanto entusiasmo como controversias.
La presencia de Messi en la India, un país con una vibrante cultura futbolística aún en auge y con una economía en crecimiento, reflejó esa dualidad: por un lado, la oportunidad de potenciar la imagen del deporte y las marcas, y por otro, los problemas logísticos y de gestión que aún persisten.
Con una duración de tres días, la gira de Messi por la India deja una huella en la historia del deporte en ese país, y abre la puerta a futuras visitas y eventos que, por su escala y costo, tendrán que ser mejor planificados para evitar incidentes y maximizar su impacto positivo.
Desde sus primeros pasos en Barcelona hasta ser considerado uno de los mejores futbolistas del mundo, Messi ha demostrado en cada país y continente su capacidad para influir y transformar el fútbol y la cultura deportiva global, y su paso por la India no fue la excepción.