En una conmovedora declaración, Bárbara Pérez, la hermana de una joven de 18 años que perdió la vida tras ser atropellada por un vehículo de la policía en las afueras del Estadio Monumental de Santiago, ha solicitado ayuda legal para su familia y ha exigido justicia por la muerte de su hermana y de otras víctimas del trágico incidente.

La tragedia ocurrió durante disturbios cercanos al estadio, donde se desarrollaba un partido de la Copa Libertadores entre el equipo local, Colo Colo, y el club brasileño Fortaleza.

Según informaron los Carabineros, un grupo de hinchas intentó ingresar al recinto deportivo sin entradas, lo que generó una avalancha entre los accesos.

Bárbara Pérez compartió que su hermana se encontraba acompañada por dos amigos en el momento de los hechos. "Ella llevaba la entrada en la mano, así como su identificación. No intentaron colarse, simplemente querían disfrutar del partido", explicó con lágrimas en los ojos. La joven víctima fue asistida por uno de sus amigos, Nicolás, quien intentó protegerla, pero el impacto del vehículo policiaco fue inevitable. La víctima llegó al hospital "sin signos vitales", mientras que el conductor del vehiculo, un carro utilizado para dispersar multitudes, nunca llegó a disculparse o ofrecer alguna explicación.

"El carabinero que la atropelló nunca vino a ver cómo estaba. La única persona que me habló fue la que la trasladó al hospital", lamentó Bárbara. La angustia se apodera de ella al pensar que si había niños presentes, el oficial debió haber tenido más cuidado y detenerse. "Esto me causa mucha rabia y frustración. Era mi hermana", añadió.

Bárbara también denunció que los otros dos jóvenes que la acompañaban fueron detenidos con la intención de declarar, pero argumentó que nunca debieron ser tratados como delincuentes.

"Carabineros los culparon de causar el accidente, pero solo trataban de acceder al estadio como cualquier otro hincha", subrayó.

Desesperada y con la carga emocional de perder a su hermana, Bárbara exige justicia y ha pedido asistencia legal para presentar una denuncia formal.

"No tenemos recursos, somos trabajadores. Necesito ayuda para demandar", enfatizó. "Esto no quedará así. Mi madre está destruida; le han robado el futuro a mi hermana, quien amaba el fútbol y a su equipo", expresó.

En los disturbios, también se reportó la muerte de un menor de 13 años, quien, de acuerdo a las declaraciones del fiscal Francisco Morales, fue aplastado por una reja de seguridad.

El fiscal comentó que, en el contexto de la avalancha, la reja caída jugó un papel determinante en el deceso del joven.

La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) emitió un comunicado lamentando la muerte de ambos hinchas y expresando sus condolencias a sus familias.

Por su parte, el partido fue suspendido por las circunstancias trágicas que rodearon el incidente. Es un recordatorio doloroso sobre la necesidad de revisar las medidas de seguridad y el manejo de multitudes en eventos deportivos, para evitar que tragedias como esta vuelvan a suceder.