El Inter Miami de Lionel Messi comienza su andanza en la Champions de la CONCACAF con un partido crucial frente a Sporting Kansas City, donde intentará conquistar uno de los pocos títulos que le falta al astro argentino.
Este miércoles a las 22:00 (hora argentina) dará comienzo oficialmente la temporada 2025 para el Inter Miami, y por ende, para Lionel Messi. Este año marcará la número 22 desde que el astro argentino se convirtió en profesional en 2004. La primera prueba para el equipo será el partido de ida de la primera ronda de la Champions de la CONCACAF, donde se medirán ante el Sporting Kansas City.
Si logran avanzar, el Inter Miami pasará a los octavos de final con la meta de conseguir un nuevo trofeo.
La relevancia de este torneo radica en que es uno de los pocos títulos que aún se le escapan a Messi, quien ha sido el futbolista más laureado de la historia.
La lista de trofeos que no ha logrado obtener se torna breve en comparación con los numerosos trofeos que ha conquistado a lo largo de su carrera. Uno de esos trofeos es el Sudamericano Sub 20, competición que ha eludido históricamente a Argentina, reforzando una especie de karma que persiste a través de las generaciones.
En días recientes, este karma se hizo presente nuevamente con la derrota del equipo dirigido por Diego Placente. También le falta por conquistar la Copa de Francia, torneo del que se quedó sin premio durante su estadía en el París Saint Germain.
La Champions de la CONCACAF, antes conocida como Concachampions, destaca como otro de los campeonatos pendientes en el impresionante currículum del ídolo argentino.
En esta nueva etapa, el Inter Miami cuenta con un nuevo director técnico: Javier Mascherano. El equipo debe superar la ronda preliminar de la Champions americana antes de llegar a los octavos de final, donde el Cavalier FC de Jamaica espera al ganador de esta serie.
Es importante resaltar que durante la temporada anterior, el Inter Miami fue eliminado en cuartos de final por los Rayados de Monterrey, un equipo con el que perdió en un par de encuentros plagados de controversias, incluyendo un enfrentamiento entre Messi y varios entrenadores argentinos.
Este triste desenlace ha dejado al Inter Miami con la espina de no haber conseguido este trofeo hasta ahora, junto con otros títulos que le han sido esquivos, como la US Open Cup y la Major League Soccer.
El choque contra Sporting Kansas City también presenta un desafío adicional: el clima. El estado donde se jugará el partido actualmente atraviesa una grave ola de frío polar, con temperaturas que rondan hasta los -20 grados Celsius. Por esta razón, lo que estaba programado para el martes fue pospuesto para el miércoles, debido a la nieve que amenaza continuar en las horas previas al partido.
Este frío extremo representa un factor importante en la contienda, ya que Inter Miami no está acostumbrado a tales condiciones climáticas, propias de la cálida península de Florida.
Existe incluso la posibilidad de que el árbitro paralice el encuentro si las condiciones lo requieren, obligando a una reprogramación.
Luego de una gira por Latinoamérica enfrentando diversas selecciones, este encuentro marca el debut del Inter Miami en competiciones oficiales bajo el mando de Mascherano.
La plantilla, encabezada por Lionel Messi y acompañada por jugadores de renombre como Luis Suárez, Sergio Busquets y Jordi Alba, se prepara para esta nueva aventura competitiva.
Cabe mencionar que el Inter Miami también contiende en el Mundial de Clubes, un torneo que Messi ya tuvo la oportunidad de ganar con el Barcelona, aunque en un formato diferente que la FIFA implementó para la edición de 2025, donde habrá competencia entre 31 clubes, incluyendo a Boca y River.
El formato de la Champions de la CONCACAF requiere que se disputen partidos de eliminación directa, divididos en enfrentamientos de ida y vuelta, exceptuando la final que se celebrará en un único encuentro.
En este año se ha implementado una nueva fase previa para los 16 mejores equipos de la región, de donde comenzará su camino el Inter Miami. Este baluarte del fútbol estadounidense competirá por un sueño que ha permanecido fuera de su alcance por mucho tiempo.